En medio del feriado en la Argentina por el Día de la Memoria, el mercado internacional volvió a castigar ayer a los bonos de la deuda argentina en Nueva York, lo que refleja no solo la vulnerabilidad de la economía nacional sino -y sobre todo- la desconfianza en la última operatoria lanzada por el Ministerio de Economía: la pesificación de los bonos en dólares que tienen 131 organismos estatales, en especial la Anses.
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En medio del feriado en la Argentina por el Día de la Memoria, el mercado internacional volvió a castigar ayer a los bonos de la deuda argentina en Nueva York, lo que refleja no solo la vulnerabilidad de la economía nacional sino -y sobre todo- la desconfianza en la última operatoria lanzada por el Ministerio de Economía: la pesificación de los bonos en dólares que tienen 131 organismos estatales, en especial la Anses.
En Nueva York los títulos públicos cotizaron con caídas acumuladas de hasta el 8,5% en la semana, lo que hizo subir el riesgo país.
Los bonos globales bajo ley extranjera retrocedieron este viernes hasta 1,8% promedio.
Por su parte, los ADR de empresas argentinas que operaron en las Bolsas de esa ciudad norteamericana cerraron de manera mixta.
Se destacó la caída de Edenor (-2,5%), y la suba de Central Puerto (+3,9%).
El riesgo país para la Argentina, medido por JP Morgan, subió 2,1% y se ubicó en 2.549 puntos básicos, un máximo desde el 7 de noviembre último y también muy por encima de los 1.791 puntos registrados el 30 de enero, y que fue el punto más bajo observado durante los meses en que Sergio Massa conduce el Ministerio de Economía.
La reacción de los bonos fue lógica pura. Si el mercado sabe que habrá más oferta de papeles -y encima papeles que no hay mucho interés en comprarlos- los precios necesariamente van a caer.
Además, se esperan conocer las condiciones precisas en que van a salir a la venta, dado que no está claro todavía si se habilitarán subastas abiertas o ventas directas.
Ordenamiento
Economía promueve la operación como parte de una estrategia de "ordenamiento" de las cuentas públicas. El secretario de Finanzas, Eduardo Setti, destacó que el canje de bonos apunta a continuar reordenando los activos financieros, y lograr "un manejo prudente y eficiente".
Setti señaló que a través del decreto que establece la pesificación de los bonos de los organismos públicos "se busca en particular maximizar el resultado de las operaciones financieras en el mercado de capitales, utilizando procedimientos confiables y transparentes".
"De esta manera, el Ministerio de Economía, en coordinación con Banco Central, va a contar con capacidad de actuar en el mercado de dólares financieros sin afectar las reservas", agregó el secretario.