La política se "juega" mucho en el Superclásico por la prueba de fuego de la seguridad. Y en ese contexto, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, pidió que el River-Boca sea "en paz" y remarcó que "están todos los recaudos" en materia de prevención para evitar incidentes en las inmediaciones del estadio Monumental.
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La política se "juega" mucho en el Superclásico por la prueba de fuego de la seguridad. Y en ese contexto, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, pidió que el River-Boca sea "en paz" y remarcó que "están todos los recaudos" en materia de prevención para evitar incidentes en las inmediaciones del estadio Monumental.
"Le pido a la gente que vaya en paz a la cancha", sostuvo el precandidato presidencial del PRO, en la antesala de un nuevo duelo entre el millonario y el xeneize.
En declaraciones radiales, Rodríguez Larreta destacó el operativo de seguridad, que contará con 1.400 efectivos de la Policía de la Ciudad, pero advirtió: "No debiéramos preocuparnos, pero conozco la realidad. Espero que sea una fiesta del fútbol", concluyó el jefe de Gobierno porteño.
Las puertas se abrirán a las 13:30, cuatro horas antes del partido, y los hinchas deberán pasar por tres anillos de controles antes de ingresar al estadio.
Teniendo en cuenta el último encuentro disputado entre ambos, en marzo de 2022 en el mismo recinto, se incrementó en 150 el número de uniformados abocados al operativo, debido al aumento del aforo en el Monumental por las remodelaciones. Habrá presencia policial en zonas puntuales de los accesos y se escoltará a los micros de los dos planteles, tanto en los ingresos como en los egresos.