Salta se prepara para celebrar la Fiesta del Milagro, una de las festividades católicas más importantes en la región, en la cual miles de personas renuevan su pacto de fidelidad con los santos patronos. Cada 15 de septiembre las calles de la ciudad se llenan de peregrinos provenientes de todos los rincones del territorio salteño y de provincias vecinas, quienes recorren largas distancias a pie o en bicicleta para participar en esta gran celebración.
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Salta se prepara para celebrar la Fiesta del Milagro, una de las festividades católicas más importantes en la región, en la cual miles de personas renuevan su pacto de fidelidad con los santos patronos. Cada 15 de septiembre las calles de la ciudad se llenan de peregrinos provenientes de todos los rincones del territorio salteño y de provincias vecinas, quienes recorren largas distancias a pie o en bicicleta para participar en esta gran celebración.
En este contexto, dentro de muy poco, el próximo 22, a las 17, se realizará la esperada entronización de las sagradas imágenes del Señor y la Virgen del Milagro. Este acto marca el comienzo de un nuevo tiempo del Milagro, este año bajo el lema "Milagro, camino que renueva nuestra fe y nuestro bautismo". La entronización es un momento de profunda emoción y devoción, en la cual las imágenes serán trasladadas desde sus camerinos habituales y ocuparán los tronos principales de la Catedral Basílica.
Allí, desde el 26 de julio al 1 de septiembre serán visitadas por cientos de instituciones, familias y peregrinos de distintos puntos de la provincia y el país, que se acercarán a rendir su homenaje y depositar a los pies de los santos patronos las plegarias y ruegos por sus necesidades. Luego, del 25 al 27 de julio está programado por segundo año consecutivo el "Milagro de los Enfermos"; el 1 de septiembre el tradicional "Milagrito de los Niños" y el 2 de septiembre el "Milagro Juvenil". El calendario de actividades se completa con el rezo de la novena en honor al Señor y la Virgen del Milagro del 6 al 14 de septiembre.
De acuerdo a lo difundido por la Catedral, las intenciones del nuevo Milagro son fortalecer la fe y la unidad, siendo testimonio de esperanza en el resucitado y renovando la conciencia del bautismo. Se busca promover la vivencia de la fe en el mundo actual.
Primera reunión
Mario Sangüezo, coordinador de la peregrinación de la Puna, participó de la primera reunión de coordinadores de peregrinaciones en Salta realizada el sábado pasado en el Seminario Conciliar. Destacó que la reunión se centró en conocerse y tratar asuntos de organización, especialmente la seguridad durante la caminata y la necesidad de unificar las delegaciones por departamento para evitar confusiones.
La peregrinación de la Puna es una de las más grandes en la fiesta del Milagro, con un incremento significativo en la cantidad de participantes cada año. Sangüezo comentó que, debido a la gran cantidad de peregrinos, el tiempo asignado a cada delegación no es suficiente, generando retrasos para aquellos que llegan después. Comentó: "Empezamos a caminar cerca de 2.000 peregrinos y terminamos en capital con casi 6.000 personas, o sea que es muchísimo. Se van sumando muchos en el camino".
En la próxima reunión, que se llevará a cabo el 8 de agosto, Sangüezo estima que se definirá la organización de la llegada a la Catedral y que la mayor cantidad de delegaciones lleguen el día 13 a pie, al igual que aquellos que utilizan bicicletas o caballos, para permitir reservar el 14 para aquellos que vienen de lugares más lejanos. Por otra parte, Sangüezo hizo hincapié en la transparencia de la gestión y enfatizó que no se aceptarán donaciones en efectivo ni transferencias bancarias. Explicó que la idea es evitar malentendidos y ser lo más transparentes posible. Enfatizó en que "ninguna persona, grupo o entidad puede presentarse en nombre de los Peregrinos de la Puna sin la debida autorización de la comisión organizadora", y que únicamente se recibirán artículos necesarios para la asistencia de los peregrinos, como pan, agua, mercadería, carne y pollo.
Como uno de los iniciadores de la peregrinación de los mineros hace más de 15 años, Sangüezo consideró el Milagro como un retiro espiritual y una oportunidad para servir al prójimo. Destacó la importancia de la salud de los peregrinos, especialmente de los mayores y los menores de edad, y mencionó la convocatoria a los colaboradores habituales para coordinar las donaciones y aprovechar al máximo los recursos ofrecidos.