¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

5 de Mayo,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

La educación superior ante la revolución de la inteligencia artificial

Estamos en un punto de inflexión. La demanda de modalidades de aprendizaje flexibles está en aumento. La IA promete cambiar la cara de la educación del siglo XXI.
Martes, 13 de febrero de 2024 00:00

Vivimos en una era trascendental, donde la intersección entre la revolución tecnológica y la creciente influencia de la inteligencia artificial (IA) está redefiniendo el panorama de la educación superior en el mundo y, particularmente, en Argentina. Recientes datos provistos por el Fondo Monetario Internacional (FMI) subrayan que el 40% de los empleos a nivel mundial están directamente vinculados a la IA, presentando desafíos y, al mismo tiempo, oportunidades excepcionales para el sistema educativo de nivel superior.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

Vivimos en una era trascendental, donde la intersección entre la revolución tecnológica y la creciente influencia de la inteligencia artificial (IA) está redefiniendo el panorama de la educación superior en el mundo y, particularmente, en Argentina. Recientes datos provistos por el Fondo Monetario Internacional (FMI) subrayan que el 40% de los empleos a nivel mundial están directamente vinculados a la IA, presentando desafíos y, al mismo tiempo, oportunidades excepcionales para el sistema educativo de nivel superior.

Argentina alberga una red de 135 instituciones universitarias, divididas equitativamente entre gestión estatal y privada. La mitad de estas instituciones recibe apoyo financiero del Estado, lo que ha impulsado una tasa de matriculación notablemente alta en comparación con otras naciones de América Latina y el Caribe. En el año 2021, se ofrecieron un total de 2.335 títulos a nivel pregrado y 5.146 títulos de grado, atrayendo a una impresionante matrícula de más de 2.700.000 estudiantes de los cuales el 80% aproximadamente está matriculado en Universidades de gestión estatal. Sin embargo, la tasa de permanencia en el primer año de estudios de grado se mantiene en un rango del 58% al 62%. Estos datos subrayan la importancia de mejorar el seguimiento y la evaluación de las políticas implementadas para garantizar un rendimiento académico más sólido.

No obstante, la accesibilidad no es sinónimo de éxito académico. El nivel superior universitario en Argentina enfrenta desafíos sustanciales en términos de tasas de retención y finalización, ya que menos del 30% de los estudiantes logran completar sus estudios en el tiempo estipulado. Estas estadísticas reflejan una necesidad apremiante de abordar la problemática de la permanencia estudiantil, especialmente en el contexto de las transformaciones globales, incluida la llegada de la IA al mercado laboral.

Las propuestas del actual presidente Javier Milei para modificar la gratuidad de la educación superior, la posibilidad de establecer aranceles para estudiantes extranjeros, ajustar la frecuencia de evaluaciones externas, la posibilidad de hacer convenios internacionales y reformar la distribución de fondos estatales generan incertidumbre en la comunidad educativa. Aunque estas propuestas buscan aumentar la eficiencia y la transparencia, plantean preguntas críticas sobre la autonomía universitaria y la accesibilidad a la educación. Además, en mi opinión, atienden sólo una pequeña parte de los retos que debe enfrentar el sistema universitario en la actualidad

Ante estos desafíos, se vuelve imperativo que las universidades argentinas adopten un enfoque proactivo. La adaptación y actualización curricular para incluir contenidos relacionados con la IA, la colaboración estrecha con la industria para comprender sus necesidades en constante evolución, y la promoción activa de la diversidad son acciones clave. Además, es esencial poner un énfasis renovado en el desarrollo de habilidades y competencias relevantes para un futuro marcado por la IA lo cual, seguramente, traerá aparejado la redefinición presupuestaria y las áreas en donde se deberán destinar las partidas

Tendencias mundiales

Ahondando en las tendencias macroeconómicas que darán forma al futuro, la IA ya ha permeado la educación y las universidades de diversas maneras. Desde aplicaciones predictivas hasta la flexibilización de las fronteras entre modalidades de aprendizaje; la IA está emergiendo como protagonista en la transformación de la educación. La dicotomía entre el aprendizaje en línea y cara a cara está siendo desafiada, y la analítica del aprendizaje, respaldada por la IA y todos los recursos que ofrece, se ha convertido en una herramienta valiosa en la gestión, administración, enseñanza y aprendizaje. En la Argentina actual la modalidad de aprendizaje es principalmente presencial; el 91% de los alumnos matriculados lo están en esta modalidad; solo un 9% está en distancia aunque esta modalidad va ganando más adeptos luego de la pandemia y ahora más con la irrupción de la IA; en el año 2021 el 13% de los ingresantes a las universidades lo hizo en la modalidad a distancia aunque cabe destacar también que el límite de la presencialidad acotado al aula física también se desdibujó a causa de la incorporación de la tecnología y los nuevos modelos híbridos que permiten brindar el servicio educativo de manera sincrónica y asincrónica están en auge.

Destacados analistas mundiales señalan como mínimo seis elementos como fuerzas impulsoras en el futuro de la educación superior: aplicaciones de IA para el aprendizaje personal predictivo, IA generativa, desdibujar los límites entre modalidades de aprendizaje, flexibilidad, microcredenciales y el apoyo a un sentido de pertenencia y conectividad estudiantil.

Navegar por estas tendencias y escenarios plantea la pregunta fundamental: ¿Cuáles son los principales desafíos que enfrentan las universidades? Fundamentalmente, la adaptabilidad se presenta como un elemento clave en este panorama en constante evolución. La inversión en tecnología y la priorización de la equidad son factores esenciales para prepararse para un futuro impulsado por la IA. Este proceso de preparación no solo implica abrazar la tecnología, sino también replantear la forma en que construimos comunidades educativas, se brinda el servicio y se realizan las investigaciones y se fomenta un aprendizaje significativo.

Nuevos trabajos

En el ámbito profesional y laboral en general, la IA está transformando la forma de trabajar y la dinámica de contratación, además de la naturaleza de las habilidades demandadas. Según un reciente relevamiento efectuado por una prestigiosa consultora internacional que examinó más de 20 millones de ofertas de trabajo en el mundo, la tecnología está generando una necesidad constante de nuevas habilidades, especialmente con la llegada de la IA generativa. No obstante, la brecha entre la oferta educativa y las habilidades requeridas es evidente, ya que solo el 13% de los graduados universitarios poseen las habilidades necesarias para integrarse de inmediato al mundo laboral.

Otras investigaciones refuerzan esta brecha, indicando que el 54% de los graduados universitarios no trabajan en su campo de estudio original, y los empleos que estarán disponibles dentro de cinco a diez años podrían no existir en la actualidad. En este sentido, fortalecer el valor de un título tradicional implica una revisión profunda de los planes de estudio y programas de capacitación ofrecidos por las instituciones de educación superior.

Con avances tecnológicos rápidos y la creciente globalización, las organizaciones buscan desesperadamente talento, y Estados Unidos lidera en el mundo la transición hacia la contratación basada en habilidades en todas las áreas profesionales, lo cual se está afianzando como una tendencia que va en crecimiento. Grandes empleadores como Dell, Accenture, IBM y Amazon ya han adoptado esta tendencia. Según un estudio publicado en el año 2022 por una reconocida revista científica internacional especializada en sicología, la contratación basada en habilidades predice cinco veces más el desempeño laboral que la contratación basada en educación y más del doble que la basada en experiencia laboral. Esto interpela y plantea renovados desafíos a la educación superior.

La adaptabilidad, entonces, se convierte en la clave en este escenario laboral en rápida evolución. Los trabajadores con educación universitaria están mejor posicionados para enfrentar la transición hacia empleos complementarios, mientras que los trabajadores mayores pueden enfrentar desafíos en términos de reempleo, adaptación a la tecnología y formación de nuevas habilidades. La respuesta a esta transformación radica en la preparación proactiva y continua de los individuos.

Impacto de la IA

En el ámbito educativo, la IA ya ha ingresado a las aulas y universidades, transformando la gestión, administración, enseñanza y aprendizaje. La analítica del aprendizaje y las aplicaciones de IA para brindar las clases, revisar y calificar tareas se han vuelto herramientas valiosas y están haciendo posible la personalización del aprendizaje. Sin embargo, esta implementación de la IA en la educación también plantea preguntas éticas y la necesidad de políticas regulatorias adecuadas, que próximamente constituirán otro desafío.

Ante este panorama, es imperativo que las universidades asuman un papel proactivo. La adaptación curricular, la incorporación de nuevos recursos tecnológicos, la colaboración con la industria, el impulso de nuevas líneas investigativas, el desarrollo de habilidades, la promoción de la diversidad y el énfasis en la ética son acciones clave. Además, la flexibilidad en los modelos de educación y el fomento del emprendimiento son esenciales para preparar a los estudiantes para un futuro impulsado por la IA.

La educación superior enfrenta desafíos y oportunidades sin precedentes en la era de la inteligencia artificial. La preparación de los estudiantes y profesionales, junto con la adaptación de las instituciones, determinará el curso de la educación superior en los próximos años. Es imperativo que Argentina y otras naciones aborden estos desafíos con políticas innovadoras y un compromiso claro con la equidad y la excelencia educativa. El futuro de la educación superior está tomando forma, y es responsabilidad de la comunidad educativa liderar este cambio hacia un futuro sostenible e inclusivo.

 

PUBLICIDAD