A pesar de las múltiples advertencias de las compañías de seguridad –que insisten en que cualquier persona puede ser víctima de un ciberataque–, sigue flotando en el ambiente una percepción equivocada sobre los hackers. Las noticias que aparecen en la prensa suelen hacer referencia a los hackeos sufridos por grandes empresas o por organizaciones gubernamentales, y no por los pequeños usuarios. Por eso, tendemos a pensar que no es un problema nuestro.
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A pesar de las múltiples advertencias de las compañías de seguridad –que insisten en que cualquier persona puede ser víctima de un ciberataque–, sigue flotando en el ambiente una percepción equivocada sobre los hackers. Las noticias que aparecen en la prensa suelen hacer referencia a los hackeos sufridos por grandes empresas o por organizaciones gubernamentales, y no por los pequeños usuarios. Por eso, tendemos a pensar que no es un problema nuestro.
Sin embargo, la realidad es muy distinta. Las estadísticas más recientes sugieren que un 90 % de los hackeos en 2024 atacan a las pequeñas empresas, en lugar de a las grandes compañías y organizaciones. Se trata entonces de un problema de percepción. La prensa, por supuesto, se hace eco muy rápidamente si se produce un hackeo en un ministerio, pero difícilmente atenderán a un ciberataque sufrido por la agencia de seguros de la esquina.
¿Por qué los hackers atacan a los pequeños negocios?
Como podés imaginar, las grandes compañías invierten muchísimo dinero en reforzar sus medidas de ciberseguridad. Cuanto más dinero hay en juego, mayor es la inversión para protegerlo, de manera que los bancos, las grandes empresas tecnológicas o los principales productores energéticos estén cada vez más blindados ante posibles ciberataques y hackeos. Esto hace que un ciberatacante lo tenga muy difícil con estas grandes empresas.
La mayoría de los hackers busca ganar dinero, sin que importe demasiado quién es la víctima. Los depredadores tienden a cazar los animales más lentos y vulnerables, y los hackers hacen lo mismo. Cualquier pequeña empresa que mueva varios miles de dólares al mes y que tenga sus datos bancarios al alcance de la red es una víctima perfecta para un hacker, porque sus sistemas de ciberseguridad son mucho más endebles y fáciles de superar.
Así podés proteger tu negocio ante los hackeos
La buena noticia es que no necesitás una inversión millonaria para poder proteger tu negocio ante este tipo de ciberataques. Con un conjunto sencillo de medidas de ciberseguridad básicas podés levantar las barreras suficientes para mantener a los hackers lejos de tus cuentas bancarias y tu información profesional. Esto pasa en buena medida por el uso de herramientas anti-malware, de cifrado, y anti-phishing, pero también por el mero sentido común.
● Cifrá todas tus comunicaciones. Esto suena muy sofisticado, pero es más fácil de lo que pensás. ¿Sabés qué significa VPN? Una VPN es una herramienta que podés instalar en cualquier computadora o celular para activar una conexión cifrada y segura con solo un clic. De este modo, los hackers no van a poder interceptar tus datos online.
● Cifrá tus bases de datos. También es buena idea mantener cifradas tus bases de datos, sobre todo si tenés que almacenar la información de pago de tus clientes. ¡Lo último que querés es ver el nombre de tu empresa en una lista de compañías afectadas por una filtración de datos causada por un hacker!
● Protegete frente al malware. Todos tus dispositivos pueden sufrir infecciones de malware. Sí, también tu iPhone y tu computadora Mac. Si algo usa un sistema operativo, puede verse infectado por el software malicioso, así que asegurate de contar siempre con una herramienta anti-malware actualizada en todos ellos.
● Desconfiá de los enlaces. Las redes sociales, el correo electrónico, WhatsApp, los SMS… Prácticamente cualquier plataforma puede ser un lugar apto para que los hackers nos hagan llegar enlaces fraudulentos. Desconfiá de mensajes con enlaces no solicitados, sobre todo si se trata de mensajes comprimidos.
● Protegé tus cuentas online. Cualquier cuenta a la que tengas que acceder online debe estar protegida por una contraseña robusta que no hayas utilizado en ninguna otra cuenta. Además deberías activar la autenticación en dos pasos siempre que te sea posible, para que resulte todavía más difícil hackearlas.
La formación del personal es indispensable para prevenir el phishing Cualquier pequeña empresa puede contar con una cierta cantidad de personal contratado, por más que sea mínima. Y este personal seguramente tendrá acceso a las computadoras o a las cuentas online de la compañía. Por eso es tan importante dedicar algo de tiempo a formar a este personal para que cuente con los conocimientos de ciberseguridad necesarios. Gestión de contraseñas, actualización de aplicaciones, escaneos anti-malware… ¡todo suma!
Es especialmente importante educar al personal de la empresa para que conozca las estrategias más comúnmente utilizadas por los hackers para vulnerar las cuentas de las pequeñas empresas. Entre estas técnicas destaca sobre todo el phishing, así que podrías empezar por ahí. Los mensajes fraudulentos, las webs falsas y los SMS con enlaces cortos deberían ser amenazas bien conocidas si querés minimizar el riesgo de sufrir un hackeo.