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Pedido desesperado

Domingo, 12 de abril de 2015 00:00
Una niña de dos años internada en un hospital de la localidad mendocina de Guaymallén con un cuadro de hipoxia (deficencia severa de oxígeno) encefálica, fue trasladada ayer a Rosario en un avión sanitario dispuesto por los ministerios de Salud de Mendoza y Buenos Aires tras el pedido de su madre que llegó a encadenarse en la puerta del centro de salud para exigir respuestas por su hija.
La mujer, identificada como Daniela Correa, decidió encadenarse el jueves pasado en la puerta del Hospital Notti en espera de un avión sanitario que permita trasladar a su hija enferma a la ciudad de Rosario, de donde son oriundos.
La niña llego sin signos vitales al Hospital Scaravelli de Guaymallén luego de caer a un canal de riego el 26 de octubre pasado y tras varios minutos de reanimación los médicos lograron reanimarla y se decidió el traslado a otro centro de salud donde se le diagnosticó hipoxia encefálica severa. En ese momento la madre inició gestiones con la provincia de Santa Fe y en Buenos Aires para que la ayudaran a trasladar a su hija en un avión sanitario, aeronave que Mendoza no dispone. Tras varios meses sin una respuesta positiva, la mujer decidió encadenarse a la espera de una solución.

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Una niña de dos años internada en un hospital de la localidad mendocina de Guaymallén con un cuadro de hipoxia (deficencia severa de oxígeno) encefálica, fue trasladada ayer a Rosario en un avión sanitario dispuesto por los ministerios de Salud de Mendoza y Buenos Aires tras el pedido de su madre que llegó a encadenarse en la puerta del centro de salud para exigir respuestas por su hija.
La mujer, identificada como Daniela Correa, decidió encadenarse el jueves pasado en la puerta del Hospital Notti en espera de un avión sanitario que permita trasladar a su hija enferma a la ciudad de Rosario, de donde son oriundos.
La niña llego sin signos vitales al Hospital Scaravelli de Guaymallén luego de caer a un canal de riego el 26 de octubre pasado y tras varios minutos de reanimación los médicos lograron reanimarla y se decidió el traslado a otro centro de salud donde se le diagnosticó hipoxia encefálica severa. En ese momento la madre inició gestiones con la provincia de Santa Fe y en Buenos Aires para que la ayudaran a trasladar a su hija en un avión sanitario, aeronave que Mendoza no dispone. Tras varios meses sin una respuesta positiva, la mujer decidió encadenarse a la espera de una solución.