El sector minero ha sido el de mayor crecimiento en Jujuy en los últimos años. En nuestra provincia se han dado los primeros pasos en cuanto a proyectos en marcha, como los vinculados al litio y se ha insertado una nueva industria que abrió un abanico de posibilidades de desarrollo no sólo para las empresas mineras sino para otras empresas radicadas en la provincia.
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El sector minero ha sido el de mayor crecimiento en Jujuy en los últimos años. En nuestra provincia se han dado los primeros pasos en cuanto a proyectos en marcha, como los vinculados al litio y se ha insertado una nueva industria que abrió un abanico de posibilidades de desarrollo no sólo para las empresas mineras sino para otras empresas radicadas en la provincia.
En un contexto político de transición como el que viviremos en 2015 en Argentina, el común denominador de todas las plataformas políticas es la necesidad de generar fuentes de trabajo en el sector privado.
Los guarismos e indicadores económicos provinciales muestran que en Jujuy lo que más se desarrolla son los recursos naturales. El sector minero está apuntalado desde el trabajo de empresas históricas como Aguilar y Pirquitas, algunas más jóvenes como los proyectos de litio de Sales de Jujuy, que inició su producción en diciembre de 2014 y Exar, cuya planta piloto inauguró también en diciembre y que prevé el inicio de producción en breve. Ellas más los proyectos en desarrollo, las canteras y demás emprendimientos dan cuenta de la importante riqueza mineral de nuestra provincia.
En términos sociales, la actividad también aporta a la educación. En ese sentido es digno de mencionar los últimos avances como la creación de un Instituto de Desarrollo de Tecnologías vinculadas al litio. Este proyecto en marcha se ideó a partir de los desarrollos de las empresas vinculadas al sector, pensando que Jujuy tiene posibilidades de generar un centro tecnológico para formar, capacitar, influenciar y conseguir que se amplíe el valor agregado a través del aprovechamiento del litio, con nuevas tecnologías o nuevos productos.
Al momento de evaluar invertir en nuestra provincia se pueden enumerar diversos factores favorables y otros no tanto, como ocurre en cualquier inversión. Entre estos últimos traer inversiones a nuestra provincia implica cuestiones más allá de las puramente económicas: la ubicación geográfica, las distancias, el mercado y el tipo de recursos que se explota en la provincia son determinantes para cualquier prospecto.
Más allá de lo mencionado hoy hay condiciones dadas para desarrollar y motorizar la economía jujeña. Hay que tener en cuenta que estamos en Argentina pero inmersos en una región y en el mundo y ninguna de las cosas que pasan en el mundo deja de afectarnos internamente. Durante los últimos años hubo algunos condicionamientos a nivel internacional y también algunos planteos internos que hicieron que la macro (economía) fuese favorable. En un momento, entre el 2009 y 2010, después de la crisis de los mercados de capitales hubo un impacto muy grande a nivel internacional y ese cimbronazo acá se notó. Luego de algunos reajustes, pusimos en juego las experiencias y herramientas que poseemos para paliar esas situaciones y generar las condiciones para que no afectara tanto a las empresas radicadas en Jujuy. Si bien, el nivel de inversiones en los últimos años ha bajado, también se da la ocasión de poder invertir en un momento de transición en donde hay cierta recesión, pero también la expectativa de crecimiento, el inicio de un ciclo de recuperación y la consecuente mejora de las condiciones hacia un futuro próximo.
Consideramos que estos son los primeros pasos y desde el punto de vista de la minería, considerándola una actividad con perspectivas a mediano y largo plazo Jujuy tiene mucho más para dar.