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25 de Junio,  Salta, Centro, Argentina
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Revolución energética: Vaca Muerta ya abastece a la industria de Brasil a través del Gasoducto Norte

Argentina inaugura una nueva era energética con la reversión del Gasoducto Norte: el gas de Vaca Muerta comenzó a llegar a Brasil, tras años de dependencia del suministro boliviano. Es un cambio geopolítico y económico que reconfigura el mapa regional del gas. 
Miércoles, 02 de abril de 2025 08:56
El Gasoducto Norte, clave para que la Argentina comience a exportar gas a Brasil.

El gas producido en Vaca Muerta -la segunda reserva de gas no convencional más grande del mundo- comenzó a llegar al mercado brasileño, atravesando territorio boliviano. Se trata de una noticia histórica: por primera vez, Argentina exporta gas al gigante sudamericano utilizando infraestructura de Bolivia, país que durante años fue proveedor regional clave, pero cuyos yacimientos hoy están en franco declino.

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El gas producido en Vaca Muerta -la segunda reserva de gas no convencional más grande del mundo- comenzó a llegar al mercado brasileño, atravesando territorio boliviano. Se trata de una noticia histórica: por primera vez, Argentina exporta gas al gigante sudamericano utilizando infraestructura de Bolivia, país que durante años fue proveedor regional clave, pero cuyos yacimientos hoy están en franco declino.

Este hito fue posible gracias a la reversión del Gasoducto Norte, una obra estratégica que transformó el sentido original del flujo de gas. Antes, el gasoducto trasladaba el fluido desde Bolivia hacia el norte argentino; ahora, el recorrido va de sur a norte, desde la cuenca neuquina hacia Brasil, pasando por Bolivia.

Un giro en la historia del gas

Durante décadas, la Argentina importó gas desde Bolivia para abastecer el norte. Sin embargo, con la caída natural de los yacimientos bolivianos y el crecimiento de la producción en Vaca Muerta, la ecuación cambió radicalmente.

El gobierno argentino impulsó la reversión del Gasoducto Norte como parte de una política para sustituir importaciones, asegurar el abastecimiento interno y abrir nuevos mercados. La obra incluyó intervenciones clave en gasoductos troncales, estaciones de compresión y válvulas, y contó con financiamiento de organismos multilaterales y del Estado nacional.

Exportaciones: contratos, volumen y destino

La operación de exportación de gas a Brasil ya está en marcha. Según confirmaron fuentes oficiales, hay más de una decena de contratos interrumpibles firmados con empresas brasileñas, con destino final en San Pablo, el principal polo industrial del país vecino.

Los contratos habilitan la exportación de hasta 18 millones de metros cúbicos diarios (MMm3/d), una cifra que representa un volumen importante en términos regionales. El sistema utiliza los ductos ya instalados en Bolivia -que habían quedado ociosos- y aprovecha la creciente capacidad productiva de Vaca Muerta, cuya infraestructura se amplió con el Gasoducto Presidente Néstor Kirchner (GPNK).

¿Por qué es clave este movimiento?

Este nuevo esquema energético tiene múltiples implicancias:

  • Geopolítica: Argentina pasa a ocupar el lugar de proveedor regional que antes tenía Bolivia.

  • Economía: Se espera un ingreso de divisas clave por exportaciones energéticas, en un momento crítico para la balanza comercial.

  • Integración regional: Se fortalece el corredor energético entre Argentina, Bolivia y Brasil, con perspectivas de continuidad y expansión.

  • Soberanía energética: Revertir el Gasoducto Norte también permite abastecer a las provincias del NOA con producción local, eliminando la dependencia de importaciones.

Lo que viene

La reversión del Gasoducto Norte se enmarca en una estrategia mayor: convertir a Argentina en un hub exportador de gas natural para América del Sur y, a futuro, para el mundo. El próximo gran paso será la licuefacción del gas para exportarlo como GNL (gas natural licuado) a mercados como Europa y Asia.

Mientras tanto, el envío de gas a Brasil marca un antes y un después. Ya no solo se trata de autoabastecimiento: ahora, Argentina comienza a juega en las grandes ligas de la exportación energética, con Vaca Muerta como estrella indiscutida.

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