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El obispo emérito de Morón, monseñor Justo Laguna, falleció ayer a los 82 años luego de ser sometido a una complicada cirugía cardíaca.
Fuentes del Obispado de Morón confirmaron que el fallecimiento de Laguna se produjo a las 2.30 y sus restos comenzaron a ser velados ayer por la tarde en la Catedral de ese distrito del oeste del Gran Buenos Aires.
Laguna, uno de los referentes de la Iglesia católica de los últimos 25 años, sufrió un “estrechamiento de válvula aórtica” por lo cual había sido operado el miércoles a las 15 en el Hospital Italiano, según confirmó su hermana Celia.
“No esperábamos esto. No parecía que iba a ser una cosa así, pero cuando uno se somete a una operación, no sabe cómo puede terminar”, afirmó la hermana del prelado.
Laguna estuvo acompañado en sus últimos minutos de vida por su amigo y obispo de San Isidro Jorge Casaretto, con quien inició relación desde su época de párroco.
Hoy, a las 19, se realizará la misa exequial luego de la cual el féretro será dejado en una cripta de la Catedral de Morón hasta que se construya la bóveda donde descansará definitivamente.