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El delegado gremial del Ferrocarril Sarmiento Rubén Pollo Sobrero aseguró hoy que la aparición con vida de Enrique Alfonso Severo, uno de los testigos en la causa por el crimen del militante del Partido Obrero (PO) Mariano Ferreyra, es “fundamental para sacar a la luz a mucha gente que debería estar presa”.
“Va a declarar todo lo que involucra el armado de una patota de un gremio. Dónde se guardaban las armas, cómo se organizó la patota, el polígono de tiro en Once”, indicó el dirigente sindical.
Sobrero advirtió que “estaba muy preocupado” por la desaparición de Severo, cuyo paradero se desconoció por más de 24 horas y fue hallado anoche maniatado y con signos de haber sido golpeado, y advirtió: “Si hubiésemos tenido otro (Julio) López hubiese sido una situación muy complicada para el país”.
“Acá sale todo, porque Severo los conoce a todos porque fue jefe. Ahora cuando declare se acabó todo porque sabe nombre por nombre”, adelantó Sobrero en referencia a la causa en la que se investigan a integrantes de la Unión Ferroviaria por el asesinato de Ferreyra.
Sobrero explicó que Severo es un exjefe ferroviario que trabajó como funcionario de Ferrobaires, que denunció es “una de las empresas más corruptas de la Argentina”.
“Yo tengo una relación profesional con él porque él fue jefe de algunos compañeros. No teníamos una amistad pero sí nos conocíamos y teníamos diálogo”, indicó para luego recordar que el día anterior a la desaparición mantuvo una conversación telefónica en la que Severo le mencionó que iba a declarar.
Finalmente, el dirigente sindical indicó: “Yo creo que tenemos una posibilidad muy seria de terminar de desenmascarar esto. Y vamos a ver qué hace el gobierno y el Ministerio de Trabajo, porque si vos tenés una organización mafiosa, como la que va a quedar demostrada en el juicio, ¿cómo puede ser que esa gente pueda representar a los trabajadores?”.