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25 de Junio,  Salta, Centro, Argentina
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?Nosotros soñábamos con poder cambiar al Hombre?

Lunes, 03 de diciembre de 2012 00:45

A fines de los 60, Roque Narvaja tenía 17 años y lo guiaba aquel espíritu beat con eje en el Hombre, en la paz y en el amor. No tuvo peor suerte que tener que vivir su adolescencia y su juventud en tiempos de la dictadura de Juan Carlos Onganía, cuando tener el pelo largo era motivo de prisión. Y, como una paradoja, a esa edad compuso “El extraño del pelo largo”, transformado luego en un himno, en un emblema del grupo La joven Guardia, pioneros y pilares de la música beat y rock en Argentina en la década del 60.

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A fines de los 60, Roque Narvaja tenía 17 años y lo guiaba aquel espíritu beat con eje en el Hombre, en la paz y en el amor. No tuvo peor suerte que tener que vivir su adolescencia y su juventud en tiempos de la dictadura de Juan Carlos Onganía, cuando tener el pelo largo era motivo de prisión. Y, como una paradoja, a esa edad compuso “El extraño del pelo largo”, transformado luego en un himno, en un emblema del grupo La joven Guardia, pioneros y pilares de la música beat y rock en Argentina en la década del 60.

Invitado para actuar en un café de la calle Belgrano, Narvaja estuvo en Salta la emana pasada y recibió a la prensa. Se presentó con un fan del folclore, seguidor de Los Chalchaleros y Los Fronterizos, así como de la poesía de Manuel J. Castilla, y admirador y amigo de Los Nocheros. Con El Tribuno hizo un repaso de su carrera y un análisis de la situación nacional.

¿Cómo fue componer música popular con Juan Carlos Onganía en el gobierno?

Nosotros estábamos adentro de un sueño y si en vez de Onganía el presidente hubiera sido Piñón Fijo nos hubiera dado lo mismo porque teníamos mucha fuerza, muchas ganas de parecernos a nuestros ídolos, Los Beatles. Nuestra revolución iba por adentro, nosotros queríamos cambiar al Hombre, hacerlo más compasivo, más misericordioso, más auténtico. Nosotros estabamos influenciados por esas ideas. Después vino “El cordobazo”.

¿Y qué pasó?

Bueno, nosotros ya teníamos “El extraño del pelo largo”en la calle, el disco se vendía y se vendía, recorríamos el país. También hacíamos películas, pero estábamos obligados a andar con un papel firmado por la compañía filmadora que nos autorizaba a andar con el pelo largo por la filmación... así evitábamos las represalias de la policía. Son cosas que pasaron y no está bueno que hayan pasado, y hoy que tenemos libertad estaría bueno que tuviéramos la misma pasión y las mismas ganas.

¿Ahora no ves esa pasión?

Las veo, pero todavía seguimos muy enfrentados, muy todos contra todos como ya nos pasó una vez y no fue bueno.

Ves riesgos en esta confrontación?

Veo el riesgo continuo de que Argentina no vuelva a ocupar el lugar que tiene que ocupar en el concierto de las grandes naciones como alguna vez lo tuvo, para mí, con hombres como San Martín, Rosas y el general Juan Domingo Perón.

¿De qué depende que podamos volver a ocuparnos del Hombre?

Depende de que ocurra un pequeño milagro de darnos importancia, de que dejemos de consumir para llenar el afuera y pensemos más en el adentro con ideas, con planes. Frondizi, también importante estadista argentino y del cual vivieron varios gobiernos posteriores, decía que “esta es una alianza de clases” para horror de los marxistas que pensaban en el momento de la “lucha de clases”. El hablaba de la alianza de clases para un propósito mayor a todos nosotros que era el desarrollo del país para llevarlo al país al lugar que debía estar. Nosotros debimos ser Canadá, debimos ser Australia, con nuestra propia manera de ser, con la ideología de los que hicieron la Revolución de Mayo. Pero, lamentablemente, fuimos rápidamente desviados... muchos nos dejamos desviar y nos dejamos llevar. Pero sería bueno que no olvidáramos a Perón con el célebre “acá nos salvamos todos juntos o no nos salva nadie”. Sin dudas, gracias a Dios hay algunos jóvenes tocados por la varita mágica del interés por el otro, y lo importante es que hay una juventud que despierta y que rompe la inopia y el desinterés.

¿Qué recuerdos tenés de la Joven Guardia?

Los más bellos. Estar en la Joven Guardia y ser famoso en la adolescencia es como si todos los días fuera tu cumpleaños. Así de fuerte.

Después vino España, el vínculo con Litto Nebbia...¿cuál es la riqueza cosechada en todo eso?

Lo que más me enseñó a mí fueron mis propios errores en la vida y en la profesión, pero por suerte he tenido revancha y me siento muy gratificado. Hay canciones mías que a la gente le han servido para pasar momentos difíciles y no solo en este país, y eso hace que uno se sienta más útil. No indispensable ni siquiera importante, útil. Dios me dio la posibilidad de llegar a un montón de gente y creo que va a estar contento por lo que hice con eso.

¿Tuvieron algo que ver “El extraño del pelo largo” y “La extraña de las botas rosas?”

El extraño del pelo largo tuvo su lugar en un sitio del rock nacional que el mismo rock rescata, en tanto “La extraña de las botas rosas” ( de Enrique Masllorenz y Félix Pando) se rescató en un comercial premiado de una conocida gaseosa cuyo director fue Luis Puenzo, luego ganador del Oscar con “La historia oficial”. Tuvimos dos días de filmación muy llenos del espíritu de los 60 con mucha creatividad y forma beat, que es toda una forma de ver la creatividad, bastante interesante.

¿ “El extraño del pelo largo” es alguien de carne y hueso o solo una inspiración?

No.. yo hablaba del peludo que pasaba por la calle y a que le tiraba piedras todo el mundo.

¿Qué se siente al ser parte de esa generación que abrió las puertas al rock nacional?

Me hace ruido en algún lugar cuando decís que yo formo parte de esa generación. Yo hice canciones beat porque era lo que me gustaba, Beatles, Kins, Rolling Stone. Tomamos ese espíritu de postguerra que habían heredado los jóvenes ingleses o americanos, pero yo vivía en Buenos Aires, no sé por qué el enganche con esa tendencia, pero estaba y fuerte. Creo que mi pertenencia al rock nacional es dudosa pero la acepto con mucho agradecimiento y honor.

¿Que recordás de lo que me imagino habrán sido las corridas del Gobierno a esos melenudos?

Nada más que dormir varias noches en comisarías. Por el pelo largo, noche por medio nos guardaban. La que fue perseguida por la dictadura de (Jorge Rafael) Videla fue la Joven Guardia, pero ya no existía más. Gente de Inteligencia del gobierno no muy bien informada, fue a buscar al grupo a la compañía RCA cuando hacía años que ya no estaba.

¿Y a vos?

Seguro, también me buscaron, pero ya estaba en España.

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