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El futbolista de Lanús Leandro Díaz fue asaltado por cuatro delincuentes que irrumpieron en su departamento del partido bonaerense de Lanús, donde uno de ellos le gatilló “dos o tres veces” en el pecho, pero los disparos no salieron.
El delantero tucumano, de 20 años, advirtió que “así pongan el ejército, roban todos los días” en la zona y contó que el incidente se produjo el miércoles a la noche, alrededor de las 22, en uno de los departamentos del tercer piso de la calle Margarita Viel 1369, en Lanús Este.
Allí, cuatro jóvenes armados entraron a su vivienda, con un vecino como rehén, tras llamarlo a la puerta por su apodo (Leo), mientras el deportista se encontraba junto a su hermano Hernán y un primo.
“Estábamos jugando con mi hermano y mi primo con la “Play”. Sentimos que alguien dice mi nombre en la puerta y abrí, pensando que era alguno de los chicos de Lanús que también viven acá. Se me metieron cuatro tipos armados. Empezamos a forcejear, a pelear”, relató Díaz.
Las tres víctimas se trabaron en lucha con los delincuentes, uno de los cuales llevó al jugador al dormitorio, le exigió la entrega de dinero y, tras apoderarse de unos diez mil pesos, gatilló su arma pero no salieron los disparos.
Los delincuentes escaparon en un auto Peugeot 307 color gris y no fueron detenidos.
“Si yo tenía un arma, alguno iba a quedar muerto porque yo en un momento no pensaba, por defender a mi hermano y a mi primo”. Díaz se entrena con la cuarta división, tras un paso de seis meses por Tigre.