¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

Su sesión ha expirado

Iniciar sesión
26 de Junio,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

La producción de gas de Salta se hunde cada día más

Jueves, 31 de octubre de 2013 01:07
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

Desde 2008, la producción gasífera de Salta no para de caer y el horizonte muestra cada vez más comprometido el futuro de las fuentes laborales que dependen de la actividad de los yacimientos de San Martín, sus plantas complementarias, la refinería de Campo Durán y las empresas que prestan servicios a las operadoras de Ramos (Pluspetrol), Acambuco (Pan American Energy) y Aguarage (Tecpetrol).

En esas tres áreas del norte salteño está concentrada la producción de la provincia y la Cuenca Hidrocarburífera Noroeste.

Con ellas, Salta fue hasta hace pocos años la segunda productora nacional del gas natural del país, superada sólo por Neuquén.

Hoy es la cuarta productora, aunque la preocupación no pasa por las posiciones del ránking, sino por todo lo está en juego con las inyecciones de gas que vienen en caída libre desde hace cinco años.

El congelamiento de precios en boca de pozos argentinos, el consecuente abandono de las inversiones en los yacimientos nacionales y la terca política que tiene a la Argentina atada a importaciones cada vez más caras y voluminosas desde Bolivia o en buques metaneros (GNL), tuvo desde 2003 la fuerza arrasadora de un tsunami. Y fueron los yacimientos del norte salteño, en su proximidad con Bolivia, los que más hondo cayeron.

La caída

Registros del Instituto Argentino del Gas y del Petróleo, que pueden verse en la página oficial del IAPG y en este informe de El Tribuno, eximen de cualquier comentario: a mediados de 2008 las áreas de Ramos, Acambuco y Aguarage aportaban más de 19 millones de metros cúbicos diarios y hoy, cinco años después, apenas superan los 9,5 millones.

¿Es este el piso más bajo? La respuesta más que en la naturaleza de la Cuenca, está en las decisiones políticas que deberían sincerar una intervención imposible de sostener, a menos que la Casa Rosada, el Ministerio de Planificación Federal, el ENARGAS y la empresa estatal ENARSA estén resignados a asistir al cierre de Refinería del Norte en no más de dos años, cuando Bolivia habilite en Madrejones la planta que separará los gases ricos de los flujos de exportación a la Argentina.

Cuando ello ocurra, la refinería de Refinor en Campo Durán no tendrá suficiente gas para mantener operativos sus procesos, ya que sus plantas necesitan al menos 20 millones de metros cúbicos diarios de gas que hasta 2007 recibía de los yacimientos salteños, pero que hoy son aportados mayoritariamente por el gas húmedo importado desde Bolivia a más de 10 dólares el millón de BTU (medida equivalente a 27 metros cúbicos).

Mientras esto ocurre, en los pozos salteños el gobierno nacional mantiene depreciado el mismo gas a menos de 3 dólares el millón de BTU, con consecuencias a la vista en los desplomados yacimientos de San Martín, que siguen perdiendo producciones y reservas a niveles alarmantes.

El pasado martes, la petrolera estatal del vecino país (YPFB) confirmó que hasta el 30 de abril de 2014 elevará las entregas de gas a Argentina a 15 millones de metros cúbicos diarios. El precio pactado con Enarsa es de 10,11 dólares el millón de BTU, un valor tres veces más alto que el que se paga en los pozos salteños.

El secretario de Energía de la Nación, Daniel Cameron, aseveró que la Argentina comenzará a reducir sus importaciones de gas en 2015. “A fines de 2021 lograríamos el autoabastecimiento”, dijo la semana pasada.

Amplían gasoductos en el norte de la provincia

En contraste con el derrumbe de los yacimientos de San Martín, se construyen en el norte nuevos tendidos para ampliar la capacidad de los gasoductos que opera la empresa TGN. Las obras, que permitirán transportar otros 15 millones de metros cúbicos diarios de gas natural hacia la región central del país, concuerdan con la creciente importación desde Bolivia.

El proyecto de expansión empezó a ejecutarse a fines de 2007, con una primera etapa que incrementó la capacidad de transporte en 1,5 millones de metros cúbicos y una segunda fase que añadió tuberías y equipos de compresión para otros 5,2 millones de metros cúbicos diarios.

Por estos días la contratista principal Odebretch y las subcontratistas Contreras Hermanos y BTU ejecutan otros tres tramos de ductos paralelos (loops) y obras complementarias en las plantas compresoras existentes entre Campo Durán y el sur de la provincia de Santa Fe.

Un primer tramo se extiende con 45 kilómetros de nueva cañería hasta Pichanal. El segundo, con otros 26 kilómetros de ductos subsidiarios, se ejecuta entre Recreo (Catamarca) y Deán Funes (Córdoba). El tercero, en tanto, se corresponde con una línea de 30 kilómetros, paralela al ramal Deán Funes-Ferreyra, en Córdoba.

El proyecto de expansión que aprobó el ENARGAS contempla la construcción de 1.860 kilómetros de gasoductos paralelos y la incorporación de 55.000 HP de potencia adicional en cinco plantas compresoras: dos ya existentes y tres nuevas.

La primera etapa de obras -habilitada en diciembre de 2008- había incluido 319 kilómetros de gasoductos paralelos entre Lumbreras (Salta) y la zona Litoral (Rosario y Santa Fe). Como parte de esa misma contratación fue construida una nueva planta compresora, de 10.310 HP de potencia, en la localidad de Tío Pujio (Córdoba). En la segunda etapa se licitaron otros 800 kilómetros de nuevas líneas laterales.

 

PUBLICIDAD
PUBLICIDAD