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Un megaoperativo antidroga fue realizado ayer por la tarde en la zona conocida como Bajo Chico. Alrededor de las 13, efectivos de la División Operaciones de Drogas Peligrosas detuvieron en la intersección de las calles Ituzaingó y Costanera a un sujeto identificado como Leopoldo Reynoso (45) quien se solía movilizar en un automóvil Renault Sandero 0KM, negro, con vidrios polarizados, dominio KOB840. En el interior de ese vehículo los policías hallaron 5 botellas de plástico rellenas con pasta base de cocaína. Además de un ladrillo, una bolsa negra con la sustancia granulada, 39 bochitas, 240 dosis de paco, elementos de fraccionamiento y $7045. El rodado quedó secuestrado. El sospechoso es propietario de dos viviendas que fueron allanadas simultáneamente; una ubicada sobre el tramo final de la calle Ituzaingó y otra situada en el barrio 23 de Agosto, al finalizar la calle Lavalle. En ese inmueble, los investigadores secuestraron 39 envoltorios grandes y 260 pequeños de la misma sustancia, tres celulares con mensajes comprometedores y otros elementos de interés para la causa.
El megaoperativo estuvo encabezado por el jefe de la Policía, Marcelo Lami, el jefe de la División Operaciones de Drogas Peligrosas, Marcelo Alvarez y el subjefe Nicasio Fabian. Un total de 20 policías del Grupo de Operaciones de Alto Riesgo (GOPAR), de Infantería y del 911 rodearon la zona.
La prueba narcotest arrojó como resultado un total de 4 kilos y 25 gramos de pasta base de cocaína.
Fuentes policiales informaron que el estupefaciente incautado está valuado en $20.000.
“Las botellas que contienen la droga son de plástico y tienen una capacidad para 600 centímetros cúbicos. Son de gaseosa y no se comercializan en nuestro país, sino en Chile. Estaban selladas en el pico con masilla. Es una modalidad utilizada por traficantes para esconderlas en el motor de vehículos. La droga hallada proviene de Bolivia. Aparentemente el sospechoso realizaba viajes constantes a ese país. Sospechamos que estamos ante un distribuidor que hace entregas del estupefaciente en diferentes puntos de la ciudad ”, informaron los investigadores.
Siete personas mayores de edad también fueron demoradas y trasladadas a la base de la División Operaciones. “Estaban en el lugar del hecho y el juez determinará la responsabilidad de cada una de ellas, si son cómplices o colaboradores”.
Una investigación de larga data
Altas fuentes policiales explicaron que “este operativo es producto de una investigación que se viene realizando desde hace meses atrás. La persona encausada comercializaba la droga en el Bajo, una zona de difícil acceso para nosotros, no porque no sea posible que ingresemos, sino porque no podemos desarrollar nuestra labor de investigación como quisiéramos, ya que todos los residentes del lugar se conocen y en pocos segundos advierten la presencia de la Policía. Nos lleva un largo tiempo. Es todo un proceso realizar este tipo de investigación”.
“Se inició una tarea de seguimiento al actual detenido y cuando observamos que se introducía al Bajo, lo detuvimos. Otras personas que estaban cercanas a él también fueron demoradas. Evidentemente tienen cierto grado de complicidad. La detención del investigado fue en la calle. Lo interceptamos cuando estaba vendiendo la sustancia y en su automóvil se secuestró el grueso de la misma. La colaboración de la gente es importante. Sin ellos no podríamos llegar a detectar a este tipo de delincuentes que se dedican a la venta de estupefacientes. Cuando el personal ingresó a la zona recibió insultos, algo muy común aquí. Ser rechazados por la gente es habitual, pero guardando las medidas de seguridad necesarias, nosotros debemos hacer cumplir la ley a como dé lugar”, finalizaron las fuentes.