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Con una mano atrás y otra adelante, y un vagón de ilusiones a cuestas, en el 2001 -en plena crisis nacional- Sergio Martínez preparaba sus maletas para viajar al Viejo Continente, más precisamente a España. Antes de partir fue campeón argentino y latino de los welter de la Organización Mundial de Boxeo. Tras una infinidad de malas y buenas experiencias arriba y abajo del ring, hoy llega a su país no solo con la corona de los mediano del Consejo Mundial, sino también como uno de los mejores boxeadores del momento.
Maravilla Martínez arribará al aeropuerto de Ezeiza a las 7.30 en un vuelo de la compañía aérea española Iberia, junto a su técnico Pablo Sarmiento y el equipo de colaboradores, y, de inmediato, se trasladará al Hotel Sheraton, ubicado en el barrio de Retiro. Llegará procedente de Madrid para defender su título el próximo sábado frente al invicto inglés Martin Murray en el estadio de Vélez Sarsfield.
Luego de haberse preparado en suelo ibérico, el quilmeño, de 38 años, arribará con casi una semana de antelación para la esperada contienda. Sin dudas será un hecho deportivo que marcará un antes y un después en la historia del boxeo nacional. Una pelea para alquilar balcones.
Antes de partir rumbo a su país el campeón oriundo de Avellaneda y criado en Quilmes, dejó un mensaje en su cuenta de Twitter: “Ultima sesión de sparring. El domingo en Argentina. Hasta la victoria siempre. Necesito que Vélez reviente el 27. Arriba Argentina, los necesito cerca”. Por primera vez el argentino defenderá el título del CMB de las 154 libras (72,600 kg) y decidió hacerlo en su país. Más de 40.000 almas espera la organización del megaevento para el próximo sábado.
En tanto, Murray, de 30 años y actual monarca interino de la AMB, estuvo el viernes en Vélez, en el marco del partido entre el Fortín y Newell's, para observar el estadio. Ya instalados ambos en el país, el miércoles tendrá lugar la conferencia de prensa previa a la pelea. Se realizará en el Hotel Sheraton a las 4 de la tarde.