¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

Su sesión ha expirado

Iniciar sesión
15°
28 de Junio,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

Capriles impugnará las elecciones y eleva la tensión

Sabado, 27 de abril de 2013 22:58
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

“Algunos rectores del Consejo Nacional Electoral (CNE) creen que somos tontos. Les mintieron a los venezolanos y a la comunidad internacional. Y ahora pretenden burlarse de todos”, así definió Henrique Capriles ayer el papel del organismo electoral venezolano, manejado a voluntad por el chavismo como el resto de las instituciones estatales, con lo que subió la apuesta y confirmó que se prepara para impugnar los resultados de las elecciones del 14 de abril.

“Los cuadernos de votación son la prueba de que el voto se corresponde con quien lo ejerció. No revisarlo hace la auditoría una farsa”, dijo Capriles.

“En ellos están lo que los rectores del CNE no quieren que veas. ¿Cuántos muertos aparecen votando y votaron?”, atacó el gobernador de Miranda desde su cuenta de Twitter. Y son precisamente los muertos uno de los grandes interrogantes que sobrevuela el proceso electoral venezolano. Según cálculos de la oposición, por lo menos 600.000 fallecidos permanecen en el registro electoral. En el comando electoral de Capriles se han recibido denuncias de personas que creen que se está utilizando a sus seres queridos ya fallecidos para votar. Pero la única forma de comprobarlo es a través, precisamente, de los cuadernos de votación.

De hecho, gran parte del país desconoce que la única forma de que el familiar muerto desaparezca del registro es llevando un acta de defunción al CNE. El líder opositor reiteró que está convencido de que Maduro se robó las elecciones. “Ponemos en duda que los votos de Maduro fueran los que sacó. ¿Cómo podemos demostrarlo? Con un proceso de auditoría”, aseveró. “Metieron más votos de los que realmente tienen. Nosotros hemos ganado las elecciones.”

Anteayer, se esperaba una pronunciación del CNE sobre la auditoría de las elecciones, luego de que representantes del organismo se reunieran para definir los pasos a seguir.

Roberto Abdul, presidente de la ONG Súmate, confirmó ayer que desde la semana pasada la oposición reclamó al CNE acceso a los resultados, amparada en más de 7.000 denuncias.

De esta forma, el comando de campaña de Capriles detectaría si hubo “usurpación de voto”, es decir, que una persona aparezca votando sin haber votado, incluidos algunos de los 600.000 muertos.

Con el cierre en falso de la auditoría, el Gobierno se apuntó una victoria política. El chavismo nunca consideró que la oposición pudiera revisar los detalles del voto, pero necesitaba el amague del CNE para destrabar la Cumbre de la Unasur en Lima y, sobre todo, la postura de Brasil y Colombia, que exigían el recuento de los votos. Hoy, con Maduro reconocido por el continente, las denuncias de la oposición tendrán un eco relativo.

¿Qué le queda a Capriles tras la decisión del CNE? Ya anunció su hoja de ruta: impugnar las elecciones antes del 6 de mayo, cuando expira el plazo de presentación. El equipo jurídico de la oposición trabaja “a toda marcha” para presentar sus pruebas ante el Tribunal Supremo de Justicia.

En el seno de la alianza democrática saben que el tribunal rechazará sus argumentos, como ha sucedido durante la última década con todas las sentencias que afectaban al oficialismo. El siguiente paso consistiría en dirigirse a instancias internacionales, como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.

Temas de la nota

PUBLICIDAD
PUBLICIDAD