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Opinan los maldicientes de siempre que el gobierno del abogado Juan Manuel Urtubey se mueve impulsado por la fuerza de las sospechas que sus propias actitudes y acciones generan y alimentan. Y dan ejemplos, de los que rescatamos tres, para no abundar: la promoción digitada en puestos importantes de personas de no acreditada idoneidad (casos de Buabse y Troyano), ya sea por amiguismo, o por otros intereses; la situación nada clara del Fondo de Reparación Histórica del Norte de la Provincia, que estuvo a cargo de Rodolfo Urtubey, hermano del gobernador, y la adjudicación de viviendas en Lomas de Medeiros. Y nos detengamos aquí porque el espacio de esta página es limitado.
Y ahora tenemos, siguiendo coherentemente esa línea de conducta, la inopinada e injustificada inclusión de Virginia Loutaif, hija menor del ministro de Gobierno renovador-urtubeísta cristinista Julio César Loutaif, en la terna para reemplazar a Yolanda Bargardi, que se jubiló, en la Asesoría de Incapaces Nº 3 de esta ciudad capital.
La terna original que el Consejo de la Magistratura envió al gobernador Urtubey para que él elija a una de las abogadas propuestas, estaba integrada por María Tatiana Dip Torres, María Gabriela Cardón y Silvia Gabenda, las tres de reconocido desenvolvimiento profesional y conocimiento de la función a cumplir.
Dip Torres, actual Asesora de Incapaces Nº 2 de la ciudad de Tartagal, era la que figuraba, por sus antecedentes, con mayores posibilidades. Su designación se descontaba. Pero inexplicablemente María Tatiana Dip Torres dio un paso al costado y el Consejo de la Magistratura completó la terna con la benjamina del señor ministro renovador, etcétera.
Virginia Loutaif es una joven abogada que carece de antecedentes profesionales y de experiencia en la materia y en la función a la que aspira.
Las sospechas que se barajan en fuentes judiciales apuntan a que el gobernador terminará por elegirla para reemplazar a Yolanda Bargardi.
Se comenta que Urtubey tendrá en cuenta para inclinar el platillo de su balanza a favor de Virginia, el parentesco de su ministro político con la neófita candidata.
Nadie debería asombrarse, ¿acaso se olvida que el gobernador dio su bendición burocrática a Buabse y a Maximiliano Troyano?
Y no hay que olvidar también que Urtubey insiste en promocionar a su hermano Rodolfo como candidato a senador nacional, pese a que los números, la sensatez y la lógica le dicen que no.
Al respecto aparecieron afiches respaldando esa candidatura. En ellos se lee: “La misma sangre. / La misma lucha”.
Algunas personas consideran que se inspiraron en ese reclamo oficialista ciertos volantes contra la probable designación de la joven Loutaif: “A la lucha, a la lucha, / que no somos capaces, / pero somos truchas.”