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La ruptura del Partido Renovador y la candidatura del vicegobernador Andrés Zottos por afuera del Frente para la Victoria estalló como una bomba en el urtubeycismo. “Nosotros no pateamos el tablero. Los que cambiaron las reglas de juego fueron ellos”, dijo el vicegobernador en una entrevista con El Tribuno, en la que sostuvo que “nosotros somos el oficialismo”. Zottos disputará una banca en el Senado nacional. En la boleta lo acompaña, encabezando la lista de diputados nacionales, el ex intendente Roberto Gramaglia.
Zottos es optimista, piensa caminar la provincia, donde el electorado lo conoce. “Ni considero la posibilidad de quedar afuera del Senado”.
“Me molesta que me comparen con Julio Cobos, porque no traicioné a nadie”, señala, al recordar la conflictiva relación de Cristina Fernández de Kirchner con su vicepresidente.
Tampoco cree que la relación con Urtubey vaya a ser traumática a partir de la ruptura. “La sangre no va a llegar al río”, dijo, a pesar de que el gobierno provincial echó a todos los funcionarios fieles al PRS y a él mismo no quieren dejarlo entrar al Grand Bourg.
En todo momento Zottos reivindica que fue suya la iniciativa de acercarse y aliarse con Néstor Kirchner, antes de que su sumara Juan Manuel Urtubey y cuando Cristina Fiore y varios justicialistas que hoy lo colocan como opositor se oponían a la coalición.
Con 52 años, este empresario “nacido en Tartagal y enamorado del norte”, decidió que su carrera política tiene un amplio camino por recorrer: “Quiero ser gobernador y trabajo para lograrlo”.
¿Usted rompió con el proyecto que a nivel nacional encabeza Cristina de Kirchner?
De ninguna manera. Yo mantengo absoluta fidelidad al proyecto original que nos unió en 2007, que preservaba la identidad de los partidos que lo integraban, el Frente para la Victoria y el Partido Renovador. Habíamos definido objetivos muy claros, a partir del respeto por las diferencias, el consenso en las decisiones y los lugares de cada partido. Aquí, el tablero lo patearon ellos cuando cambiaron las reglas de juego.
¿El detonante fue la designación de Cristina Fiore como candidata a senadora?
En cierto modo, fue la gota que rebalsó la copa. Nosotros no cuestionamos la designación del hermano de Urtubey; la aceptamos, pero el segundo lugar correspondía al PRS y quienes debíamos elegir el nombre éramos nosotros.
Fiore es del PRS...
Ella pasó por varios encolumnamientos. Ahora está con Urtubey y no se cuánto tardará en afiliarse al PJ.
¿Ustedes la cuestionan por que votó a favor de la reforma judicial?
Ese el argumento que usa el gobierno provincial para ponernos en la vereda de enfrente, pero es falso. Nosotros no aceptamos que diga una cosa y después vote otra, porque es una incongruencia y terminó en un papelón nacional. Lo que pasa es que teníamos derecho a elegir nosotros a la postulante, y no nos dejaron.
¿Cuál es la explicación para que Urtubey haya elegido a Fiore al costo de romper con el que fue su principal aliado?
No lo sé. quizá tiró demasiado de la cuerda y nos puso al borde del abismo. No creo, de ningún modo, que ella sea una traccionadora de votos.
¿Una muestra de autoridad?
Una muestra de autoritarismo que no podíamos tolerar. Además, luego de siete años, una muestra de que ellos cambiaron. Ya había señales muy claras. Miguel Isa, Godoy, Kosiner, que eran opositores al frente y ahora son oficialistas, hostigaban entonces a José Vilariño por su condición de kirchnerista; además, están fehacientemente documentadas las opiniones de Fiore sobre nuestra alianza con Urtubey. Ahora todos ellos invocan la lealtad a Cristina para descalificarnos. ¡Cómo cambian los tiempos!.
Ellos sostienen que representan el espacio K y ustedes el anti K...
Todos ellos, incluido Urtubey, llegaron al kirchnerismo después de nosotros. Yo, personalmente, fui quien empezó a abrir puertas para pedir obras en el norte de nuestra provincia, y me las fueron dando. Y nosotros no vamos a renegar jamás del proyecto nacional de inclusión al que adherimos desde el primer momento. De hecho, a ninguno de nosotros se nos escuchó hablar del final del kirchnerismo ni de un proyecto presidencial alternativo para 2015, como está ocurriendo con algunos de ellos.
¿Cristina los apoya?
Tengo la certeza de que con el paso de los días vamos a tener un apoyo cada vez más visible.
Fiore y Loutaif quedaron virtualmente afuera del PRS.
Siguen siendo afiliados.
Pero existe la sensación de que el grueso de los renovadores ya no se los banca...
Hay una clara decepción, sobre todo, por el atropello que sufrió el PRS.
Y los intendentes ...
Las coyunturas obligan a tragar algunos sapos cada tanto, pero ellos siguen siendo renovadores. Y aquí lo que se juega es la identidad y la historia del PRS.
¿Cuál es su proyecto en lo inmediato?
Asumir como senador en diciembre. Mientras tanto, seguir ejerciendo como vicegobernador.
Va a ser difícil la convivencia...
No va a llegar la sangre al río.
Pero ya despidieron a muchos empleados cercanos a usted.
No creo que Urtubey vaya a dejar a esos trabajadores en la calle. Son muchas familias que se quedan sin trabajo. Nosotros, cuando llegamos en 2007, no echamos a nadie.
¿Qué sintió cuando lo compararon con Julio Cobos?
Molestia, porque es injusto. Absolutamente injusto. Yo no traicioné a nadie ni voté en contra de mi gobierno.
Y como senador, ¿piensa ser oficialista u opositor a nivel nacional?
Hay algo que está claro: el oficialismo somos nosotros. Yo fui diputado nacional cuando el presidente era Néstor Kirchner. En esas circunstancias me acerqué a su proyecto y a su gestión, fui bien recibido, voté leyes fundamentales, como la primera reforma al Consejo de la Magistratura y acompañé los juicios políticos contra los miembros de la Corte menemista. Yo voy a apoyar todo aquello que requiera el proyecto de inclusión social, como hice siempre.
¿Cuáles serían sus prioridades al asumir la banca?
Consolidar el proyecto de inclusión social. Voy a defender los intereses de Salta y a representar a la provincia. El gobernador dice que necesita senadores que lo acompañen y lo respalden. Basta con ver mi trayectoria para darse cuenta de que no le esquivo al bulto y que sé cómo golpear puertas. Y si hace falta, cómo patearlas.
¿Qué puertas habría que golpear ahora?
Mirando la realidad de nuestra provincia, veo tres urgencias: narcotráfico, inseguridad y desempleo. Pero si la mirada es estratégica, salta a la vista que hace falta despertar conciencia sobre nuestras fronteras. Por una parte, el crimen organizado está ganando la batalla. Hacen falta gendarmes, radares, ley de derribo y, de una vez por todas, abrir el juzgado federal de Tartagal. Falta una política adecuada para las áreas de frontera. Esa es una parte. La otra, esencial, es la necesidad de generar infraestructura para estimular el desarrollo económico de toda la región norte. Rivadavia, San Martín y Orán son tres departamentos con enorme potencial. Hay que recuperar la producción hidrocarburífera, que por una cuestión de políticas y precios, está en desventaja con respecto a Bolivia, aunque son las mismas cuencas. Y hay que multiplicar la ganadería, la agricultura, la actividad forestal y la agroindustria. Y, sobre todo, hay que entender que narcotráfico y desempleo hacen una combinación nefasta.
¿Qué opina del Fondo de Reparación Histórica?
Una excelente iniciativa, que debería estar firmemente orientada al desarrollo.
¿Cómo decidió lanzarse como candidato a senador?
Creo que es necesario ofrecer propuestas, que vayan más allá de una guerra de apellidos, y yo estoy en condiciones de brindarlas.
¿Está enojado con Urtubey?
Yo no me enojo con nadie ni reniego de mis opciones, como fue el frente de 2007.
¿Tampoco está enojado con Julio Loutaif y Cristina Fiore?
El tiempo es sabio y cada uno construye su destino.
¿Quiere ser gobernador de Salta?
Trabajo para eso. Ningún político puede resignar sus aspiraciones. Trabajo para eso, con la gente, con proyectos y sin ningún agravio.
La propuesta de volver a las fuentes
En un hotel céntrico, donde se desarrolló la entrevista, Andrés Zottos se mostró distendido. Habló de su familia, de sus tres hijos, y no ocultó su fascinación con la carrera musical de Ivo, de solo nueve años y con vocación de folclorista chaqueño.
Se esforzó, en todo momento, por evitar rencores. “Nosotros queremos volver a las fuentes; el frente que formamos con Normando Arciénaga se centraba en valores comunes: la persona, la provincia, el progreso. La pluralidad era esencial. Ahora quieren que seamos todos peronistas y que respondamos a un jefe”.
Ese “retorno a las fuentes” incluye otros aspectos: “Nosotros siempre sostuvimos que un gobernador solo debe tener una reelección. Lo seguimos sosteniendo”, dijo. “También sostenemos las asignaciones familiares, las políticas de inclusión y los derechos humanos. Pero la unidad solo puede existir si se respeta la diversidad”.