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El lunes cerca de las 20, Fredi Soriano (33 años) y Luisa Delia Jerón (33) tuvieron que retirar el cuerpito de su beba de la morgue, en el hospital San Bernardo. Con el corazón desgarrado y la bronca de saber que se podría haber evitado la muerte de su hija, regresaron a su hogar. “Ahí la tengo a la beba y a mi mujer destrozada, nos volvemos a San Antonio de los Cobres”, sostuvo el padre.
Denuncian que por una mala praxis perdieron su beba el sábado pasado y no tienen consuelo. “Faltaban dos semanas para el nacimiento. El sábado cerca de las cuatro de la mañana mi señora comenzó a sentirse mal y a las siete rompió bolsa y rápido salimos para el hospital”, expresó Fredi. En el nosocomio Luisa fue atendida por una enfermera que la revisó y dejó todo listo para el parto. Luego de una hora llegó Graciela Colque, la médica de guardia. “Le dijo a mi señora que tenía tres de dilatación, pero que no iban a correr el riesgo de atenderla ahí porque faltaban dos semanas para el parto y dispuso su derivación a Salta”, contó Soriano. “Pese a comprobar que Luisa había roto bolsa la subió en la cabina de adelante de la ambulancia junto a una enfermera y el chofer. Mi cuñada la acompañó y fue atrás. Mi señora viajó las dos horas y media sentada y llegó toda mojada a Salta”, explicó indignado. Y agregó: “Tres cuadras antes de llegar al Materno Infantil, a mi mujer recién la pusieron en una camilla con un suero improvisado, simulando que había viajado bien”, Llegaron a la capital cerca de las 12.30, y según Soriano, en el nuevo hospital de niños su esposa esperó una hora y media para ser atendida. De acuerdo con el relato de la mujer una médica se dignó a preguntarle qué pasaba, la revisó y le dijo que hacía rato tendría que haber sido atendida. Según Soriano “la llevaron a un consultorio donde un doctor le dijo que se quitara la ropa y la tuvo así, desnuda, unos cuarenta minutos”,
Al revisarla y después de un altercado con Fabiana, hermana de la mujer, el doctor se dio cuenta que no había latidos en el corazón de la beba. “Recién ahí comenzaron a las corridas pero la bebé ya estaba sin vida”, expresó con dolor el hombre. “Mi esposa todo el tiempo estuvo abandonada en un pasillo y después desnuda en un consultorio. Entre que rompió bolsa y le anunciaron la muerte de mi hija pasaron ocho horas. El doctor que la atendió primero pidió disculpas y después se fue”, dijo Soriano. Explicó que “el que salió a dar la cara fue el jefe de guardia, quien me quiso convencer de que la beba vino muerta desde San Antonio cuando nosotros sabemos que no es así. Esto no nos puede volver a pasar ni a nosotros que somos coyas de la puna, ni a nadie. Voy a ir hasta las últimas consecuencias para encontrar a los culpables. A mi hija la mataron y nadie nos de vuelve eso”.
LAS FRASES
El abogado de los padres, Carlos Correa, explicó que solicitarán la “historia clínica” y pedirán “la identificación de todos los intervinientes”. En primera instancia “la carátula sería mala praxis médica, incumplimiento de los deberes de funcionario público. Vamos a pedir que se aparte a los profesionales por -responsabilidad penal- y la reparación de los daños causados a la familia”.
“En el nombre de mi hija voy a luchar para que se haga justicia por todas esas personas que sufren por lo mismo. Por nosotros los del interior a quienes nos abandonan y nos dejan morir. Y por la gente humilde de capital que también sufre el desinterés. Estos no son profesionales, son ambiciosos. Trato de estar fuerte porque mi señora está muy mal, pero llegará un punto que me voy a derrumbar porque no doy más”, dijo Fredi.
“Mi señora pedía a gritos en el hospital de Salta que le hagan una cesarea porque la sentía a la bebé que se movía de un lado para otro. El médico legal nos manifestó que murió en el vientre de la madre. La chiquita se quedó sin oxígeno, se enloqueció y se enredo con el cordón, es verdad, pero eso pasó porque se quedó sin oxígeno”, expuso el padre, con un sensación de impotencia.
