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A partir del sábado 1 de agosto tendrán que ubicarse en el predio cedido por el municipio, ubicado a pocos metros de la plazoleta que ocupan.
Sin embargo, Moreno lamentó de que de forma extraoficial, los choripaneros hicieron conocer que no quieren moverse del lugar que ocupan y, si es necesario, se manifestarían con sus mujeres y sus hijos.
"La decisión de trasladarlos nació de la necesidad de organizar la ciudad", dijo Moreno al respecto.
Y agregó que de todas maneras, "si es necesario, recurriremos al uso de la fuerza pública para desplazarlos". Al mismo tiempo, confirmó que mantuvo reuniones con los jefes de la Policía y de Gendarmería, quienes se comprometieron a apoyar los operativos que disponga la gerencia".
Moreno y los vendedores de choripanes y pollo a la parrilla que tienen sus puestos en la calle San Martín, entre Sarmiento y Nougués, firmaron el pasado 24 de junio un acta acuerdo en la que los comerciantes se comprometían a mejorar las condiciones en la que se encuentran trabajando actualmente y desalojar sus respectivos puestos el 31 de julio.
A días de cumplirse ese plazo el funcionario expuso ante los medios que la idea de la Gerencia a su cargo es organizar y no verse en la obligación de erradicar.
"Los vendedores tuvieron 36 días para hacer algo con la situación bromatológica que exhiben, de acuerdo a lo que ellos mismos firmaron en el acta acuerdo. Los choripaneros no se están dejando ayudar. El jueves nos reuniremos para tratar de llegar a un acuerdo. No deseo que me obliguen a utilizar la fuerza pública".
Las alternativas
En cuanto a las alternativas, el municipio sugirió lugares en los que podrían reacomodarse. La sugerencia municipal es que se reacomoden en la plazoleta Juan Domingo Perón o en un predio en la avenida Nougués esquina Vega, donde funcionaba una chatarrería. Otra opción es un terreno en calle Yrigoyen esquina Sarmiento.
Por su parte, los choripaneros aseguraron que no se van a mover de la avenida.