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La línea de 132 kV fue adjudicada en septiembre de 2014 a la empresa Zoricich Construcciones Eléctricas por $366.599.664. La contratación de la obra fue delegada a Edesa, a partir de una serie de acuerdos que suscribieron autoridades del Ministerio de Planificación Federal, la Provincia y la empresa distribuidora del servicio eléctrico de Salta.
Edesa Holding, el grupo económico que controla a la prestadora local, precisó que la firma recibió hasta el cierre de 2015 partidas por $293.279.731, con el 60,54% de los trabajos certificados. De acuerdo con esos registros, quedarían por girarse $73.319.931 para finalizar los trabajos pendientes.
A 18 meses del inicio de las obras, que tenían un plazo de ejecución de 15 meses, solo en los primeros 37 kilómetros que se extienden desde Apolinario Saravia hasta las cercanías de El Pelícano, la línea de alta tensión muestra los trabajos prácticamente concluidos. En ese tramo, sobre la banquina Este de la ruta 5, se ven las columnas erigidas sobre las fundaciones de hormigón, con todos los cables y aisladores listos para su conexión final.
En los siguientes 54 kilómetros, también están levantadas casi todas las columnas, pero no tienen los conductores eléctricos ni los dispositivos de aislación instalados. En esa sección, además, está pendiente el emplazamiento de las columnas dobles que se necesitan en las áreas serranas próximas a La Estrella.
En la citada localidad, ubicada justo en la mitad del recorrido de la línea, se construye una estación transformadora. De esa planta, distante a unos 300 metros al sur del empalme de las rutas 5 y 13 debería desprenderse, a futuro, otra red que llevaría el servicio eléctrico hasta La Unión y otras postergadas localidades de Rivadavia Banda Norte.
En la estación transformadora de la Estrella y en los 30 kilómetros de la línea en dirección a Pichanal, está la parte más retrasada del proyecto. Hay cinco kilómetros donde las columnas siguen acostadas a la vera de la ruta 50 y otros 25 kilómetros en los que solo se ejecutaron trabajos de fundación. El 19 de abril de 2015, El Tribuno había recorrido las obras. Por entonces tenían un avance del 30%. Así lo habían informado funcionarios del Ministerio de Ambiente y Producción Sustentable, el Ente Regulador de los Servicios Públicos (Enresp) y la empresa pública Recursos Energéticos y Mineros de Salta (Remsa), tras uno de los grandes apagones que dejaron a Orán y otras ciudades norteñas sin luz ni los indispensables suministros de agua potable bombeados desde fuentes subterráneas.