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Enfrentar a un equipo de primera división, para un conjunto de una cuarta categoría de ascenso, siempre será especial. Y lo fue también para los futbolistas de Central Norte, quienes unificaron un criterio a la hora de coincidir en lo mismo tras la inapelable goleada de Newell’s en Santa Fe: reconocieron que la diferencia de categoría, física y futbolística entre ambos equipos fue abrumadora, pero a la vez rescataron la entrega del plantel y el capital adquirido de aprendizaje y experiencia para estos jugadores, que tomaron este compromiso como un premio al esfuerzo, pero que el objetivo supremo es el próximo Federal B.
Para Matías Ceballos, “nos paramos bien de entrada, tratamos de plantarnos. Pero nos vamos con fastidio porque nos hicieron goles de pelota parada, algo que no nos podía pasar. Tratamos de forzar para que ellos cometan errores, pero lo de las pelotas paradas nos tiró todo atrás. Ellos tienen grandes jugadores, mucha movilidad, mucho control de pelota. Son una máquina y no pierden nunca la pelota, nosotros cuando la teníamos la perdíamos, ahora no nos queda otra que volver a casa”, dijo el volante en diálogo con FM Pacífico.
Por su parte, Tomás Armella, uno de los símbolos de sacrificio del equipo, expresó con una mezcla de emoción y tristeza: “Aguantamos hasta donde pudimos, dimos todo pero ellos demostraron calidad, por qué están en Primera y peleando arriba. Se notó mucho la diferencia de categoría. Esto marca la brecha que hay. De todas formas, esto fue un premio por el esfuerzo que hicimos después de haber perdido el último ascenso. La mayor alegría fue ver lo grande que es Central, que tanta gente haya viajado, estoy agradecido, esta gente nunca deja de sorprenderme”, señaló.