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Adrián Lizarazu es el protagonista de esta historia que podría colaborar a la hora de una emergencia para salvar vidas. Al igual que aparece el grupo sanguíneo en los registros de conducir, llevar siempre consigo la clase de enfermedad o patología que sufren las personas, le brindaría un dato importante a los médicos que atiendan a la persona ante una urgencia.
Cuando la vida pende de un hilo, los minutos son de gran importancia y esta campaña llevada a cabo por el joven oranense colaboraría a “ganar vida” en esos minutos.
El artista se volvió viral los últimos meses, horas después de que ofreciera tatuajes a bajo precio para todas las personas que quieran reflejar en la piel las enfermedades que padecen, con la condición que solo lleguen con el certificado médico que acredite su patología.
Pero su solidaridad no queda allí Adrián, hace sin cargo tatuajes para aquellas personas con el objetivo de que los médicos los vean en caso de una emergencia.
Adrián está convencido de que el tatuaje de seguridad, salva vidas ya que se realiza en personas que sufren de alguna enfermedad crónica, alergias severas a medicación, diabéticos e hipertensos.
“Los tatuajes pueden salvar vidas”
Hace un tiempo, este tatuador oranense reconoce que empezó a tener conciencia de que su arte puede ayudar a muchas personas a atravesar el dolor que muchas veces dejan marcas en la piel.
Comenzó a trabajar en tatuajes terapéuticos gratis para tapar las cicatrices de la violencia de género, de cáncer de mamas, accidentes y quemaduras.
“No hay dudas que el tatuaje es una forma expresar o resignificar situaciones vitales complicadas”, dijo convencido.
Terminología reciente
El término tatuaje terapéutico es reciente y hace referencia a los usos del tatuaje que tienen como finalidad mejorar una situación determinada de la persona que se va a tatuar. Es un término amplio, que abarca tanto las propiedades terapéuticas físicas que se empiezan a atribuir al tatuaje tribal como los efectos terapéuticos psicológicos que puede aportar un tatuaje concreto.
Uno de los ejemplos de tatuaje terapéutico más llamativos y de actualidad se encuentra en los casos de mujeres que han sobrevivido a un cáncer de mama, por ejemplo.
Las secuelas físicas y psicológicas de la enfermedad varían en cada mujer, pero muchas están encontrando en el tatuaje una salida artística a su nueva situación.
En otros casos como la violencia de género que deja secuelas con cicatrices, taparlas con una obra de arte pueden ayudar a las víctimas a olvidar el dolor o curar más rápido las secuelas psicológicas.