inicia sesión o regístrate.
Desde el Observatorio de Violencia contra las Mujeres (OVcM) manifestaron que la ley de interrupción voluntaria del embarazo representa un avance para combatir la violencia contra la libertad reproductiva, lo que está previsto en la ley nacional 26485. También indicaron que habrá que trabajar para que los médicos que aún se oponen a que el aborto sea legal o a la entrega de anticonceptivos vean las conquistas de derechos "con otros ojos".
La directora del OVcM, Ana Pérez Declercq, expresó que hay un sector importante de la población provincial que ni siquiera aplica otras leyes relacionadas con los derechos de las mujeres que están vigentes hace años, como la de Educación Sexual Integral (ESI) o la de salud reproductiva, que garantiza el acceso a métodos anticonceptivos.
"Hay objetores de métodos anticonceptivos en la provincia de Salta. Tenemos personas que realmente no están entendiendo que tienen que respetar la ley siempre que trabajen en un espacio del sistema público. Incumplen con garantizar esos derechos y no reconocen las conquistas" sostuvo.
Pérez Declercq consideró importante "trabajar muy arduo y generar los mecanismos" que permitan detectar a quienes no cumplan con los derechos vigentes.
Al ser consultada sobre el alto porcentaje de médicos objetores de conciencia en el Hospital Público Materno Infantil, respondió: "Creo que el gran cambio viene con las nuevas generaciones y también que una cosa era ser objetor de conciencia cuando no había ley y otra es serlo ahora. Se abre una puerta para quienes antes estaban negadas o negados a estos derechos puedan verlos con otros ojos".
La directora del OVM también remarcó la importancia de que se garantice la interrupción voluntaria del embarazo en cada rincón de la provincia pese a la dificultad que implica la dispersión geográfica.
"Como ocurrió con otros derechos conquistados, con el pasar de los años la sociedad se va transformando pero siempre hay que estar atentos a que se garanticen", manifestó Pérez Declercq.
Los votos de Salta
La ley de interrupción voluntaria del embarazo se aprobó en la madrugada de ayer en el Senado de la Nación con 38 votos a favor, 29 en contra y una abstención. Dos de los tres senadores nacionales por Salta apoyaron la norma.
Nora Giménez votó a favor, como lo había anticipado. "Tenemos la necesidad y el compromiso de conquistar más derechos para las mujeres porque no podemos seguir conviviendo con abortos clandestinos que generan muertes y destrucción de familias", manifestó, al fundamentar su apoyo a la ley.
El senador Sergio Leavy, que en 2018 había votado en contra del aborto, cambió de opinión y ayer apoyó la ley.
"Me di cuenta de que esto no se trata de mí, no es una situación de creencia ni de formación, es una situación que le compete a muchas mujeres", dijo en su discurso Leavy, que no difundió cuál era su decisión hasta anoche.
El senador Juan Carlos Romero votó en contra, como lo había hecho en 2018. "Esta ley no es la adecuada, no hubo suficiente consenso, es un tema delicado que hubiera merecido consenso amplio", señaló cuando le tocó hablar. "Mi voto es negativo, por que me debo a mi gente de Salta. Cuando me dieron su voto sabían que esta era mi posición. Reivindico la palabra y cumplo con lo que me comprometí", agregó.