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El vocero presidencial, Manuel Adorni, se distanció ayer de los polémicos dichos de la vicepresidenta Victoria Villarruel luego de que acusara a Francia de "colonizadora", y calificó el comentario de la funcionaria como "desafortunado".
"Lo que dijo la vicepresidenta de la Nación son palabras de la Vice y no es la postura del Gobierno", aseguró. Y reveló que la secretaria General de la Presidencia, Karina Milei, fue a la Embajada de Francia a "explicar que el desafortunado comentario en la redes fue a título personal y que no era la posición del Gobierno entremezclar cuestiones deportivas con cuestiones diplomáticas".
"Las relaciones con Francia están intactas", aseguró luego de que la titular del Senado opinara sobre la polémica con la Federación Francesa de Fútbol (FFF) por la difusión de un video con cánticos racistas publicados por el futbolista de la Selección argentina, Enzo Fernández, tras la obtención de la Copa América. "Ningún país colonialista nos va a amedrentar por una canción de cancha ni por decir las verdades que no se quieren admitir", indicó en un mensaje en la red social "X".
Lo cierto es que en el Poder Ejecutivo la frase de la titular del Senado no cayó bien, a pesar de que en un primer momento reconocidos tuiteros libertarios avalaron sus palabras. La secretaria General de la Presidencia fue la designada para aplacar la tensión y no la canciller Diana Mondino, ya que "era un tema que debían solucionar las altas esferas del Gobierno".