Con una mirada clínica y una sólida formación en biomecánica, Agustín Qüerio forma parte del equipo del Laboratorio de Movimiento Humano de UCASAL, un espacio interdisciplinar que busca generar conocimiento a través del análisis científico del movimiento. Su rol se centra en el uso de electromiografía de superficie, una técnica no invasiva que permite registrar la actividad eléctrica de los músculos. Además, el profesional trabaja en el procesamiento de datos mediante herramientas de inteligencia artificial.
El trabajo en el laboratorio se basa en la colaboración entre profesionales de distintas áreas, tomando especial valor el aporte de diferentes perspectivas en el trabajo. “Esto genera objetivos en común para un mejor tratamiento y, al mismo tiempo, un aprendizaje mutuo entre los miembros”, explica el especialista.
Respecto a la tecnología que utiliza, Qüerio detalla que la electromiografía de superficie se realiza mediante un sensor que, adherido a la piel, transmite en tiempo real la actividad eléctrica de los músculos a una base de datos. Esta información permite mejorar la comprensión de lo que sucede en el sistema osteomioarticular durante un movimiento, documentar el proceso y obtener tratamientos más precisos y eficaces.
Desde su lugar, también resalta el impacto del laboratorio en la formación de los estudiantes de la Facultad de Ciencias de la Salud y de la Escuela Universitaria de Educación Física: “Les permite conocer que estas tecnologías existen, acercarse, aprender a utilizarlas y, por lo tanto, permite que se formen mejores profesionales, más capacitados para la evaluación y el tratamiento de pacientes”.
Con profesionales de distintas disciplinas y un enfoque centrado en la ciencia aplicada, el Laboratorio de Movimiento Humano consolida su aporte a la investigación, la docencia y la mejora de la calidad de vida a través de un conocimiento riguroso, colaborativo y orientado a la innovación.
Escuchalo y conocé más sobre el laboratorio:
https://prensa.ucasal.edu.ar/formacion-lab-mov-humano-trib