Ayer a la tarde se disputó la última fecha de la Liga Metanense de Fútbol entre Deportivo El Galpón y Tráfico de Metán y cuando el árbitro dio la orden de empezar el partido, cien barrabravas se abalanzaron sobre cinco policías de la División Infantería que custodiaban el ingreso al estadio. Fueron brutalmente golpeados y zamarreados por la horda de hinchas que esperaron por horas las entradas de favor que nunca llegaron.
El encuentro comenzó a las 17.30 con cuatrocientos espectadores dentro del estadio y más de cien barrabravas en la parte externa que esperaban la cesión de entradas gratuitas por parte de los directivos del club.
Al inicio del partido comenzaron a empujar la puerta de ingreso custodiada por la Compañía Guardia de Infantería, para luego tornarse violentos y arrojar elementos contundentes acompañados de golpes de toda clase.
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Ayer a la tarde se disputó la última fecha de la Liga Metanense de Fútbol entre Deportivo El Galpón y Tráfico de Metán y cuando el árbitro dio la orden de empezar el partido, cien barrabravas se abalanzaron sobre cinco policías de la División Infantería que custodiaban el ingreso al estadio. Fueron brutalmente golpeados y zamarreados por la horda de hinchas que esperaron por horas las entradas de favor que nunca llegaron.
El encuentro comenzó a las 17.30 con cuatrocientos espectadores dentro del estadio y más de cien barrabravas en la parte externa que esperaban la cesión de entradas gratuitas por parte de los directivos del club.
Al inicio del partido comenzaron a empujar la puerta de ingreso custodiada por la Compañía Guardia de Infantería, para luego tornarse violentos y arrojar elementos contundentes acompañados de golpes de toda clase.
Lesionados
Resultó lesionado en ese conato un cabo con herida vertical en el labio superior que le produjo una intensa hemorragia. El agresor fue capturado al momento.
Allí comenzó el segundo tiempo de la gresca. Los barrabravas aprovecharon para abalanzarse e ingresar a la cancha mientras pretendían la liberación del demorado. Los barras atacaron por la retaguardia a los infantes y lograron la evasión del malviviente, quien sacó desde sus prendas, un cuchillo con el que hirió al cabo José Teseyra.
Los policías al borde del colapso, sacaron las armas y comenzaron las detonaciones, pero lejos de entrar en razón, continuaron las agresiones recibiendo el oficial a cargo del
grupo una pedrada en la cabeza que lo derribó. Fue rescatado por sus colegas, dos más que también recibieron lesiones, pero que finalmente dispersaron a los atacantes. Durante el desorden fueron demorados cuatro hombres, uno de ellos, el que había lesionado con un cuchillo al efectivo, entró a un domicilio desde donde los uniformados lo detuvieron. El sujeto apareció gravemente golpeado en el hospital, por un supuesto accidente durante su captura.
De consulta judicial con el Juzgado Correccional y de Garantías 2 a cargo Carolina Poma, la jueza de la causa dispuso causa de detención a los cuatro acusados de supuesto atentado a la autoridad. En tanto secuestraron un cuchillo de aproximadamente 25 centímetros de hoja.