Llegó el “20N” y el clima de tensión crece a cada segundo. Es que la CGT de Hugo Moyano y la CTA de Pablo Micheli llevarán adelante hoy el primer paro conjunto contra la administración de Cristina Kirchner, en medio de amenazas de bloqueos a empresas y cortes de rutas. Por su parte, el Gobierno nacional salió ayer a cuestionar duro la medida de fuerza. “Lo de mañana (por hoy), más que un paro es una medida extorsiva. Plantean interrumpir rutas. Siempre respetamos las protestas, pero nadie quiere vivir en la Argentina del apriete”, asegfuró el ministro del Interior, Florencio Randazzo.
inicia sesión o regístrate.
Llegó el “20N” y el clima de tensión crece a cada segundo. Es que la CGT de Hugo Moyano y la CTA de Pablo Micheli llevarán adelante hoy el primer paro conjunto contra la administración de Cristina Kirchner, en medio de amenazas de bloqueos a empresas y cortes de rutas. Por su parte, el Gobierno nacional salió ayer a cuestionar duro la medida de fuerza. “Lo de mañana (por hoy), más que un paro es una medida extorsiva. Plantean interrumpir rutas. Siempre respetamos las protestas, pero nadie quiere vivir en la Argentina del apriete”, asegfuró el ministro del Interior, Florencio Randazzo.
Lo cierto es que ayer, desde las 18, los camioneros ligados a Moyano comenzaron con la medida de fuerza en distintos puntos fronterizos y el cese de actividades de logística, en donde quedó afectado principalmente el abastecimiento de combustible y la recolección de residuos. Se estima que habrá más de 160 piquetes en todo el país.
La huelga nacional afectará a los vuelos de cabotaje de las principales compañías, mientras que habrá demoras en los vuelos internacionales, no habrá bancos ni recolección de residuos y se estima un alto acatamiento en los hospitales públicos de todo el país. El servicio de transporte de pasajeros tendrá una adhesión parcial, al igual que las estaciones de servicio, los subterráneos y subtes y las escuelas públicas. Además, está prevista para esta tarde una movilización a Plaza de Mayo, aunque el propio Moyano aseguró: “Yo prefiero dedicarme de lleno al paro y no a la movilización”.
Desde la otra vereda, el secretario de Seguridad, Sergio Berni, advirtió que “va a haber muchos organizadores que intentarán generar caos a través de piquetes y cortes de ruta”, y sostuvo que el Gobierno buscará asegurarle el transporte a los ciudadanos. Por su parte, el secretario gremial de la CGT “oficial” y jefe del Sindicato de Peones de Taxis, Jorge Omar Viviani, admitió ayer que la central obrera que conduce el metalúrgico Antonio Caló no será “fiscal” de la huelga nacional.
Finamente, el titular de la CGT Azul y Blanca, Luis Barrionuevo, advirtió ayer que si el Gobierno de Cristina Fernández no da “respuesta” a los reclamos que llevó al sindicalismo opositor a convocar la huelga general de mañana “tendrá que venir un paro de 36 horas con movilización”.
La denuncia
Hugo Moyano reveló ayer que el Banco Central de la República Argentina (BCRA) pagará abultados “bonos de fin de año” a sus empleados de todos los niveles, que irán desde los $ 200.000 para los directores a los $16.000 para un asistente de ordenanza. El camionero aseguró tener una copia de la resolución 651/121/12 del BCRA, que habilita un suculento premio en donde la escala alcanza a choferes (37 mil), capataz de taller de impresión y mayordomo (19.900) y hasta asistente de ordenanza (16.100), entre otros.
Para destacar
Transporte aéreo: no habrá vuelos de cabotaje de Aerolíneas, Austral, LAN, Sol y Andes. Los vuelos internacionales tendrán demoras.
La basura: en casi todo el país el servicio estará afectado, ya que dependen de Camioneros. Las autoridades piden no sacar la basura.
Los bancos: el paro será total. También quedará paralizado el transporte de caudales y el abastecimiento a los supermercados
Combustibles: si bien muchas empresarios aseguraron el normal servicio, éste se vería afectado por la falta de abastecimiento.
Los colectivos: si bien la UTA no adhiere a la medida de fuerza, algunas líneas no “harán frente” a los bloqueos en las empresas.
Salud pública: los hospitales en los que ATE tenga influencia no trabajarán. También pararán unas en 700 municipalidades del país.