La preocupación por las vertientes de agua obstruidas con barro y la reubicación de por lo menos cuatro lugareños cuyas viviendas quedaron prácticamente tapadas por el lodazal del viernes pasado, son las tareas que la comuna de Chicoana dispuso como prioritaria.
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La preocupación por las vertientes de agua obstruidas con barro y la reubicación de por lo menos cuatro lugareños cuyas viviendas quedaron prácticamente tapadas por el lodazal del viernes pasado, son las tareas que la comuna de Chicoana dispuso como prioritaria.
Tras el paso del aluvión de barro y agua, aún se espera la llegada del helicóptero de la provincia para sobrevolar la zona en cuyas altas cumbres, se sospecha, que pueden deslizarse hacia la quebrada varios “volcanes” colmados con ramas, piedras y árboles.
De las treinta familias de los parajes ubicados en las inmediaciones de la ruta provincial 33 y los alejados en varias horas de este camino que une el Valle de Lerma con Cachi, la mayoría fue socorrida con asistencia de agua potable, frazadas y colchones.
Sin embargo, varios de los lugareños pidieron un cambio de estrategia para el abastecimiento de agua en estas poblaciones, ante la escasez del vital elemento para consumo, aseo personal y el racionamiento para los animales. “Es que nos quedamos sin agua ni para nuestro ganado. La madre naturaleza nos dejó desprovistos de lo más elemental para sobrevivir: el agua”, comentó Marcos Cayo, de la zona de Escoipe
Relató que fue socorrido por personal del municipio a poco de haber cruzado el lodazal que cubre el cauce del río Chicoana.
Ante este cuadro de situación el municipio la localidad intentará reubicar a varios lugareños en los terrenos más altos de la Quebrada con el fin de protegerlos de una eventual nueva crecida.
Un tanque de agua tirado por un tractor llegó en las últimas horas al paraje Las Zanjas en donde se asiste a unos treinta chicos de las zonas aledañas afectadas.
El objetivo ahora, como paliativo, es suministrar agua de los tanques cisterna para el llenado de tachos de 50 y 100 litros, con los cuales las familias podrán disponer para sus necesidades domésticas diarias.