Andrés “Pigu” Romero nació en Yerba Buena, Tucumán, y vivió a 200 metros del Jockey Club de esa ciudad, escenario de sus primeros pasos en el mundo del golf. Estando tan cerca de los greens, no quiso evitar sus destino como jugador de golf y la cancha pasó a ser su segundo hogar. El tucumano desarrolló una notable calidad para jugar al golf; sin embargo, reconoció que el 2012 no fue uno de sus mejores años y que necesita volver a jugar bien.
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Andrés “Pigu” Romero nació en Yerba Buena, Tucumán, y vivió a 200 metros del Jockey Club de esa ciudad, escenario de sus primeros pasos en el mundo del golf. Estando tan cerca de los greens, no quiso evitar sus destino como jugador de golf y la cancha pasó a ser su segundo hogar. El tucumano desarrolló una notable calidad para jugar al golf; sin embargo, reconoció que el 2012 no fue uno de sus mejores años y que necesita volver a jugar bien.
Ayer estuvo en la cancha de La Maroma, donde compartió su saber con un grupo de amigos y dialogó con El Tribuno.
Siempre hay un momento para jugar al golf...
Sí, siempre hay, y si no existe lo creamos. La verdad es que Salta me gusta mucho, hace poco estuve con toda mi familia de vacaciones y otra cosa que la hace una de mis ciudades favoritas es que está cerca de Tucumán. Siempre me hace bien venir y más si se trata de jugar al golf. Me tomé unas vacaciones, ya que dejé de jugar hace tiempo. Por ahora estoy entrenando físicamente para encarar la próxima temporada.
¿Ya definiste como será la temporada 2013?
En principio, la semana que viene voy a estar jugando un torneo en Córdoba y después me centraré en la prte física. El 20 de enero de 2013 comienzo a viajar, y básicamente serán muchas semanas de juego, diferencia de lo que fue esta temporada. Serán cuatro semanas consecutivas de competencia, de mucha actividad.
¿Te planteaste algún objetivo particular?
El objetivo es volver a jugar bien, hace rato que no lo hago, por eso me tomé unas vacaciones antes de tiempo. Eso lo voy conseguir jugando y por eso diseñé una temporada con muchas competencias, porque siento que esa es una de las formas de progresar. Vas evaluando los golpes, el swing. A Tucumán voy a volver a fines de abril para descansar un par de semanas y luego afrontaré otras cinco semanas de torneos en forma consecutiva. Quiero hallarme porque este año he jugado muy mal, más allá de que tengo un par de resultados muy buenos en el Memorial y en Reno (Estados Unidos).
¿A qué atribuís tus malas actuaciones?
Sinceramente, me perdí. No me salía nada, fueron dos torneos buenos en todo el año, pero en general siempre quedaba atrás, en la “cola”. Por esto también decidí dejar de competir en la temporada para volver a jugar bien, entrenar en base a eso. Todo eso requiere mucho entrenamiento.
¿En algún momento pensaste en abandonar el golf?
No llegué a tanto. Pienso en seguir jugando hasta los cincuenta o hasta cuando pueda.
Iniciar una carrera deportiva siempre requiere muchos sacrificios, ¿cómo fueron tus inicios?
Nací con una enfermedad llamada nefritis, una inflamación en el riñón, que me impidió caminar los primeros seis años de vida. Cuando pude caminar, mi mamá me dijo: “Si no empezás a caminar no te vas a curar y si no te curás no vas a poder jugar al golf”. Doscientos metros separaban la puerta del club de nuestra casa y yo me pasaba todo el día en la cancha. Cuando había torneos, a las 7 ya estaba dando vueltas y recién después de las 20 volvía a mi casa.
¿Este es un deporte con muchos secretos?
Sí, pero como todos. A muchos de lo que vienen a jugar por primera vez les digo que el secreto está en ver más que en cuántas clases tomés. De chico me pasaba todo el día en la cancha viendo a los jugadores. El mejor profesor que uno puede tener es observar y aplicarlo. Conozco mucha gente que quiere jugar al golf, pero cuando viene no sabe ni agarrar un palo y eso se puede aprender observando.
¿Le cabe el termino popular al golf?
El golf se ha vuelto mucho más popular que en otros tiempos. Y lo veo en cada torneo que juego, ya que siempre hay jugadores argentinos que se presentan por primera vez y eso da la pauta de que más gente se dedica a este deporte, que es tan lindo. Hay muchísima más prensa y mucho se debe a lo que hicieron jugadores como Tiger Woods o Rory McIlroy.
El perfil
Andrés Romero, apodado Pigu, nació el 8 de mayo de 1981. Es hijo de Francisco Romero, chofer de camión, y Rosa, empleada domestica. Creció en Yerba Buena junto con sus ocho hermanos. Trabajó de caddie durante su infancia y juventud y tomó sus primeras clases de golf a los 8 años. Juega profesionalmente desde 1998 y sus mejores resultados fueron: en 2006 fue 8º en el British Open; en 2007 saltó del puesto 114 al 29 del ranking mundial en sólo 3 semanas, después de terminar 3º en el British Open, 1º en el Deutsche Bank Players Championship del Tour Europeo, y 6º en el Bridgestone Invitational; en 2008 ganó su primer título del PGA Tour, el Zurich Classic de Nueva Orleans, y finalizó 8º en el Masters.
Copa Personal NFL
El Pigu Romero participó ayer como invitado del torneo Copa Personal NFL, que se desarrolló en La Maroma. El tucumano fue la estrella de la competencia, que premió a sus ganadores y a los que lograron los mejores approach y long drives. La competencia rindió homenaje a Titingo Biurrum. Entre los caballeros se impuso Abel Cornejo, mientras que Magdalena Martínez fue la mejor de las damas. En las restantes categorías los mejores fueron: en promocionales, Tomás Martínez; en 0 a 9, 1) José Biurrum, 2) Juan Fontanilla; en 10 a 21, 1) Nicolás Piorno, 2) José Marciano; en 22 a 36, 1) Manuel Núñez Galli, 2) Federico Cornejo. Por el lado de las damas se compitió en 0 a 36, la ganadora fue Irene Gir y su escolta resultó Adriana Manresa. En tanto Magdalena Martínez se destacó además con el mejor approach y long drive. Por los caballeros los premiados fueron Juan Gómez Naar (long drive) y Nicolás Barr (approach).