Con una mezcla de decepción y resignación, luego de que el presidente Daniel Angelici acercara posiciones con Julio César Falcioni para que continúe en Boca en 2013, Juan Román Riquelme realizó ayer un raid mediático en el que se despachó contra la dirigencia xeneize, que según sus dichos le pone trabas para que regrese al club y la acusó además de operar en su contra en las tribunas. Y hasta le apuntó a La Doce al señalar que la barra se puso en su contra porque “nunca les di plata”.
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Con una mezcla de decepción y resignación, luego de que el presidente Daniel Angelici acercara posiciones con Julio César Falcioni para que continúe en Boca en 2013, Juan Román Riquelme realizó ayer un raid mediático en el que se despachó contra la dirigencia xeneize, que según sus dichos le pone trabas para que regrese al club y la acusó además de operar en su contra en las tribunas. Y hasta le apuntó a La Doce al señalar que la barra se puso en su contra porque “nunca les di plata”.
No parece casual el momento en que Riquelme salió con sus frases filosas en sendas entrevistas concedidas a los diversos medios porteños. Lo hizo horas después de que Angelici y Falcioni, las dos personas con nombre y apellido contra los que arremetió, quedaron a un paso de sellar la continuidad del vínculo.
“Amo a Boca y soy un agradecido y siempre estoy haciendo fuerza por Boca como por Villarreal, pero jamás dije que me iba a volver a poner el pantalón corto de Boca”, afirmó Riquelme, cerrando la puerta de su vuelta a la Ribera.
En sus primeras puntadas contra Angelici aseguró que no quedó fuera del fútbol cinco meses sin jugar profesionalmente por voluntad propia sino porque “Boca demoró en firmar los papeles” de su salida luego del interés del Cruzeiro y del Flamengo, ambos de Brasil. “Tenía decidido ir a jugar ahí”, reveló.
Justamente de Brasil llegó con un premio con la leyenda “A uno de los jugadores más grandes de la historia de la Copa Libertadores”. Allí fue cuando empezó con los dardos hacia Angelici, al contar que ni bien bajó del avión le pidió a su representante Daniel Bolotnicoff a que le pidiera permiso al presidente del club para mostrar ese trofeo porque “lo gané jugando para Boca”, pero que el dirigente se lo negó. “Me parecía algo lógico, pero le dijo el sábado no, así que tengo que mostrarlo por TV. Es una lástima. No es un premio más para mí porque quiere decir que hicimos las cosa bien en la Copa y defendiendo los colores de Boca de la mejor manera. Hay gente que no quiere que vuelva a la cancha”, lamentó. El sábado no será un día más. Tal vez quede firme la contratación de Falcioni pero también estará en la cancha Martín Palermo, su enemigo, como DT de Godoy Cruz.
Riquelme aseguró que tanto el presidente actual como su antecesor, Amor Ameal, operaron en su contra en las tribunas, al igual que lo hizo la barra brava. “Hicieron sacar las banderas a favor de Riquelme. Pasó con Ameal y ahora con Angelici. Boca se maneja de esta manera. Es doloroso, pero los hinchas lo tienen muy en claro”, acusó.
Falcioni, a un paso de la renovación
Julio César Falcioni quedó a un paso de renovar su contrato como técnico de Boca por un año más, luego de la reunión que mantuvo con el presidente del club, Daniel Angelici. Falcioni, cuyo vínculo finaliza el 31 diciembre, quedó en responderle a Angelici “por sí o por no en 48 horas”.
Según se detalló en el encuentro “no se habló de cifras”, pero “sí de borrar jugadores”, además “de refuerzos y darles más lugar a los juveniles del club”. Falcioni, que en cierto momento no quería seguir, primero vio con agrado el rendimiento de los jugadores contra Racing Club (3-1) y después lo sedujo la posibilidad jugar nuevamente la Copa Libertadores. Pero la realidad indica que el técnico está un poco molesto porque ahora le ofrecen renovar luego de que la dirigencia se quedó sin candidatos para reemplazarlo.
Apoyo de Ramón
“Me parece justo que Falcioni siga. Es un gran entrenador y llegó a todas las finales”, sostuvo Ramón Díaz en claro res paldo hacia el DT de Boca.
Schiavi: “Me voy tranquilo, dejé todo...”
Mañana jugará su último partido, en una Bombonera que será una caja de resonancia tras las declaraciones de Riquelme y la posible continuidad de Falcioni. Rolando Schiavi, que cerrará su etapa exitosa en el xeneize, tendrá enfrente nada menos que a su amigo Martín Palermo, flamante DT de Godoy Cruz. El Flaco se refirió a la jornada especial que vivirá en su despedida. “Es un combo de sensaciones. Es muy raro pensar que el sábado va a ser mi último partido en Boca”, señaló. “Pero me voy tranquilo, sabiendo que dejé todo, con el cariño y respeto de los hinchas en los seis años que estuve en el club y con el deseo de la dirigencia para que siguiera un tiempo más”, enumeró.
Sin embargo, Schiavi justificó su decisión: “Boca te exige muchas cosas y ya se me hacía difícil estar a la altura de las circunstancias. Por eso dar un paso al costado es lo ideal”, se sinceró. “Igualmente todavía soy jugador de fútbol. Lo de China es solo un rumor. No hay nada. Ya veré qué decisión tomo”, explicó.