Hoy ese proyecto aparece como una gran deuda pendiente para miles de salteños que se entusiasmaron con la puesta en escena de un megaproyecto ferroviario anunciado desde Salta por la propia presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
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Hoy ese proyecto aparece como una gran deuda pendiente para miles de salteños que se entusiasmaron con la puesta en escena de un megaproyecto ferroviario anunciado desde Salta por la propia presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Tres largos años pasaron de esto. Fue en julio de 2009 cuando Cristina lanzó desde Salta el tren de pasajeros para esta ciudad y con ello un plan de reactivación ferroviaria nacional.
Ese mismo año, poco antes de las elecciones, se hicieron pruebas de recorridos y surgió el proyecto de un corredor ferroviario de 21 kilómetros entre Salta y Cerrillos, con paradas estratégicas y combinaciones con el sistema de transporte de colectivos.
Pero el tiempo pasó y para algunos fue el mejor remedio para relajarse del peso de las promesas incumplidas. Solo hace falta llegar hasta los galpones ferroviarios en General Gemes, donde se guarda parte de la maquinaria adquirida a España y un montón de vagones derruidos.
¿Qué pasó con el proyecto? Nadie dijo nada hasta ahora y aquellos que tienen un poco más de cintura para esto de la gestión pública, hacen la más fácil: le echan la culpa al que ya no está, el ex secretario de Transporte de la Nación Juan Pablo Schiavi, quien “seguramente tenía otras prioridades”, como se escuchó decir a un legislador salteño.
Pero es bueno preguntarse y mejor aún escuchar alguna respuesta coherente sobre los anuncios.
¿La Nación envió dinero? En caso de ser negativo que alguien lo diga.
¿La maquinaria que se trajo de Europa estaba en funcionamiento y era operativa? ¿O solo formó parte de un negocio de transferencia de bienes?
Una de las dos máquinas que llegaron a Salta se encuentra ahora en Chaco, donde al parecer funciona de maravilla. ¿En Salta no funcionaba?
¿Y el municipio? El tren urbano coloca a la Intendencia como principal interesado en el tema, pero desde este ámbito tampoco dan respuestas concretas. El intendente Isa también estuvo junto a Cristina en aquel recordado acto de compromiso social.
A tres años de las promesas de campaña efectuada por la Presidenta, el gobernador Urtubey promete gestionar la reactivación ferroviaria y una novel legisladora nacional dijo que lo importante es “trabajar en coordinación y en equipo con otros legisladores de la región para reactivar el ferrocarril. Pero, ¿eso no se venía haciendo en todo este tiempo?
Todo parece un jarabe de pico que viene a condimentar esta decepcionante realidad de nuestro tren.
Pero hay algo para destacar en este panorama. La gente que trabaja en el mantenimiento de las vías mantiene intacta su ilusión, no solo por ser esta su única fuente de empleo, sino también por llevar en la sangre esa tradición ferroviaria: “palabra de ferroviario” dicen cuando les preguntan por la concreción de los proyectos. Ese puñado de hombres y mujeres mantiene casi inalterable el sueño de trabajo y de un tren que acorte distancias y brinde la oportunidad de un futuro mejor para las generacio nes que vienen.