Una de las grandes deudas en el fútbol argentino es el tema de la violencia. Diversificados en cada rincón de la sociedad, los violentos siguen haciendo de las suyas. El miércoles por la noche, el gran clásico salteño entre Central y Juventud fue suspendido justamente porque un grupo de “hinchas” decidió que debía suspenderse: se subieron al parapelotas, quemaron y rompieron la tribuna, entre otros desmanes. Este lunes Salta volverá a ser testigo de un nuevo clásico entre Gimnasia y Juventud, y esos que destrozaron todo fuera y dentro del estadio, tipos que impunemente terminan logrando su objetivo, estarán presentes nuevamente en la cancha. ¿Hasta cuándo?
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Una de las grandes deudas en el fútbol argentino es el tema de la violencia. Diversificados en cada rincón de la sociedad, los violentos siguen haciendo de las suyas. El miércoles por la noche, el gran clásico salteño entre Central y Juventud fue suspendido justamente porque un grupo de “hinchas” decidió que debía suspenderse: se subieron al parapelotas, quemaron y rompieron la tribuna, entre otros desmanes. Este lunes Salta volverá a ser testigo de un nuevo clásico entre Gimnasia y Juventud, y esos que destrozaron todo fuera y dentro del estadio, tipos que impunemente terminan logrando su objetivo, estarán presentes nuevamente en la cancha. ¿Hasta cuándo?
“Tenemos las grabaciones de las personas vinculadas en los hechos del miércoles”, sostuvo Fernando Jovanovics, secretario de Seguridad de la Provincia. El funcionario aseguró que todos y cada una de las personas involucradas en los desmanes están registradas. “Nosotros ponemos las imágenes a disposición de la Justicia, que es la encargada de actuar luego”, agregó.
Pero, a pesar de las imágenes, la inseguridad seguirá latente en el estadio del Gigante del Norte, ya que el fútbol salteño todavía carece de los mecanismos o herramientas necesarias para prevenir las acciones indeseadas.
Respecto al operativo del miércoles, Jovanovics sostuvo que “se utilizaron muchos recursos para la seguridad de la gente y se priorizó el choque entre las hinchadas”.
Acerca del derecho de admisión y si este depende del nivel de violencia registrado en el último tiempo, el funcionario explicó que “no tiene que ver con la gravedad de los hechos, es una herramienta a la que apuntamos y vamos a llegar”, dijo. Y agregó: “Pero esa herramienta sola tampoco es la solución, tenemos que trabajar en los controles, la concientización y distintas herramientas. Es el camino que venimos siguiendo”.