Quiero agradecer por su intermedio a un joven remisero llamado Federico Lavari -que conduce el coche N§ 42, perteneciente a General Remis-, por la notable actitud que tuvo conmigo.
El sábado 23 de este mes usé el servicio de esta empresa desde la intersección de Belgrano y Zuviría con destino a Mendoza y Lerma, y dejé olvidada en el auto una billetera con la suma de $1.800, además de tarjetas de crédito y documentos.
No sabía dónde la había extraviado, y este joven, sin ningún interés, se presentó en mi domicilio para devolverme la billetera con el dinero y la documentación completos.
Espero que con esta carta se refleje que todavía existen personas honestas, nobles y desinteresadas, cuyas actitudes son dignas de destacar.
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Quiero agradecer por su intermedio a un joven remisero llamado Federico Lavari -que conduce el coche N§ 42, perteneciente a General Remis-, por la notable actitud que tuvo conmigo.
El sábado 23 de este mes usé el servicio de esta empresa desde la intersección de Belgrano y Zuviría con destino a Mendoza y Lerma, y dejé olvidada en el auto una billetera con la suma de $1.800, además de tarjetas de crédito y documentos.
No sabía dónde la había extraviado, y este joven, sin ningún interés, se presentó en mi domicilio para devolverme la billetera con el dinero y la documentación completos.
Espero que con esta carta se refleje que todavía existen personas honestas, nobles y desinteresadas, cuyas actitudes son dignas de destacar.
Dra. Gamboni Lorena, Ciudad