Luego de un largo silencio que se extendió por poco más de dos décadas, el mítico personaje salteño conocido como el Pati'cabra -un hombre joven, buenmozo y elegante, pero con enormes patas que terminan en pezuñas dobles como las de un fauno legendario- volvió a aparecer y a aterrorizar a los testigos de su sorpresiva presentación, quienes huyeron en distintas direcciones, provocando un alboroto descomunal.
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Luego de un largo silencio que se extendió por poco más de dos décadas, el mítico personaje salteño conocido como el Pati'cabra -un hombre joven, buenmozo y elegante, pero con enormes patas que terminan en pezuñas dobles como las de un fauno legendario- volvió a aparecer y a aterrorizar a los testigos de su sorpresiva presentación, quienes huyeron en distintas direcciones, provocando un alboroto descomunal.
Ayer, en diferentes frentes informativos cubiertos por El Tribuno, nadie hablaba de otra cosa y los relatos eran coincidentes: “Estaba -dijo una chica que se identificó como Pepa y que trabaja en la Ciudad Judicial- en uno de los boliches de la zona de la terminal, cerca del cementerio. Bailaba con frenesí y llamaba la atención porque era muy elegante y buenmozo y su ritmo rockero, fantástico. Sin embargo, cuando los asistentes le hicieron una rueda y dejaron un espacio para apreciar mejor sus pasos, alguien gritó: "Miren' y señaló con su dedo índice derecho los pies del admirado danzarín. Fue el "despiplume'. Todos huyeron despavoridos”, cerró.