Panadería social y fábrica textil, son los emprendimientos sociales que mejor funcionan. El primero elabora verdaderas exquisiteces y lo más importante, lograron contener laboralmente a unos 15 jefes de familia, quienes antes estaban desocupados. A casi dos meses de comenzara funcionar, sus especialidades ya se hicieron famosas en la ciudad norteña en panadería y compiten en calidad, con las más importantes panificadoras de la región.
Juan Carlos, el maestro panadero de la “Panadería Social Tartagal”, ubicada en el barrio Lugones, explicó a El Tribuno que diariamente “los insumos y los sueldos lo costeamos con la venta del pan, porque luego de recibir el impulso para comprar las maquinaria y comenzar, nos independizamos. Trabajamos bien, muy organizados y dentro del grupo tenemos repartidores que entregan el pan en bicicletas que adaptamos para ese fin”.
Para el Día del Niño la panadería social elaboró 25.000 panes dulces que la Municipalidad repartió en comedores comunitarios y centros vecinales. De esa forma demostró que tiene capacidad, pero por sobre todo cuenta con una excelente organización para atender la demanda que existe en Tartagal.
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Panadería social y fábrica textil, son los emprendimientos sociales que mejor funcionan. El primero elabora verdaderas exquisiteces y lo más importante, lograron contener laboralmente a unos 15 jefes de familia, quienes antes estaban desocupados. A casi dos meses de comenzara funcionar, sus especialidades ya se hicieron famosas en la ciudad norteña en panadería y compiten en calidad, con las más importantes panificadoras de la región.
Juan Carlos, el maestro panadero de la “Panadería Social Tartagal”, ubicada en el barrio Lugones, explicó a El Tribuno que diariamente “los insumos y los sueldos lo costeamos con la venta del pan, porque luego de recibir el impulso para comprar las maquinaria y comenzar, nos independizamos. Trabajamos bien, muy organizados y dentro del grupo tenemos repartidores que entregan el pan en bicicletas que adaptamos para ese fin”.
Para el Día del Niño la panadería social elaboró 25.000 panes dulces que la Municipalidad repartió en comedores comunitarios y centros vecinales. De esa forma demostró que tiene capacidad, pero por sobre todo cuenta con una excelente organización para atender la demanda que existe en Tartagal.
Textil Tartagal
Otro emprendimiento que desde hace más de un año funciona en la ciudad norteña y cuyas maquinarias fueron adquiridas por la comuna, a través de un crédito de la Secretaría de Empleo de la Provincia es “Textil Tartagal”, donde actualmente trabajan una 40 mujeres.
El intendente Sergio Leavy explicó que en este caso “por tratarse de un emprendimiento de mayor envergadura cuenta con el acompañamiento del municipio, pero el objetivo es que se autosustenten y con lo que producen puedan pagar los sueldos y reaprovisionarse de insumos”.
En la actualidad la fábrica funciona en un galpón cedido por el municipio. “Textil Tartagal tiene un campo de acción muy grande, porque solamente con confeccionar guardapolvos, delantales y ropa de trabajo para diferentes empresas tienen trabajo para mucho tiempo. Dos importantes comercios de la zona, con el fin de abaratar costos les acercan prendas cortadas para que las costureras hagan el trabajo final. Estos se da, porque confían plenamente en la calidad del trabajo de los obreros”, contó el jefe comunal.
A este emprendimiento se suma “Limpieza Tartagal” inaugurada en julio de este año y se dedica a la fabricación de escobas y otros elementos de limpieza.