Dos hermanos tucumanos especializados en robos veloces a ancianos y mujeres fueron detenidos por efectivos de la Brigada de Investigaciones, a los segundos de haber atacado a un anciano, lanzarlo al piso y extraerle su billetera, en la cual la víctima tenía, además de sus tarjetas y documentos, la suma de $2.942,25.
inicia sesión o regístrate.
Dos hermanos tucumanos especializados en robos veloces a ancianos y mujeres fueron detenidos por efectivos de la Brigada de Investigaciones, a los segundos de haber atacado a un anciano, lanzarlo al piso y extraerle su billetera, en la cual la víctima tenía, además de sus tarjetas y documentos, la suma de $2.942,25.
Los delincuentes fueron identificados como Miguel Matías “Wachiperro” Britos (23) y su hermano Alfredo Enrique “Ucauca” Britos (26), recién llegados a Salta y con domicilio transitorio en uno de los tantos aguantaderos del barrio Finca Independencia, en la zona sureste de la capital.
Eran las 11.05 del jueves pasado, cuando los sujetos fueron advertidos por los sabuesos de la Brigada de Investigaciones que patrullaban la zona céntrica.
Los detectives advirtieron que uno caminaba delante de un anciano, identificado luego como Juan Carlos Quinteros (79, jubilado) y que otro se desplazaba sigilosamente detrás, haciéndose leves señas con las manos.
Los policías sospecharon de sus movimientos y los siguieron, notando que a través de códigos gestuales, habían decidido dónde y cómo dar el golpe.
Y así ocurrió a los pocos metros: en la intersección de avenida San Martín y calle Ituzaingó, frente al mercado Municipal, en un movimiento veloz, se abalanzaron sobre su víctima y le sacaron su billetera en cuestión de segundos. Acto seguido, huyeron a todo escape, pero su fuga fue interrumpida por sendos tackles de los pesquisas.
Quinteros no terminaba de gritar: “Me robaron, me robaron!”, cuando ya tenía en su poder, nuevamente, su billetera.
Los hermanos Britos fueron puestos a disposición del juez penal de turno, bajo el cargo de robo calificado. Ambos se hallaban armados y de consultas intrapoliciales, se determinó que son poseedores de un extenso prontuario en su provincia de origen.