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19 de Mayo,  Salta, Centro, Argentina
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Un preso se fugó del hospital esposado

Sabado, 09 de noviembre de 2013 02:06

Increíble pero real. Un preso generó preocupación y asombro tras fugarse de la sala de guardia del hospital San Bernardo, adonde había llegado desde la cárcel federal de General Gemes por una emergencia médica.

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Increíble pero real. Un preso generó preocupación y asombro tras fugarse de la sala de guardia del hospital San Bernardo, adonde había llegado desde la cárcel federal de General Gemes por una emergencia médica.

Como dice la frase: “como pancho por su casa”, el reo aprovechó el descuido de los custodios que debían vigilarlo y en lugar de ingresar al centro médico, cuando bajó del camión de traslados, se fue despacio hacia la calle, ocultando sus esposas por la vereda del mencionado nosocomio.

Alertados por un hombre que observó cómo se iba alejando el convicto, dos efectivos de la División Centro de Videovigilancia pusieron en conocimiento a todas las patrullas que transitaban en cercanías de la terminal de ómnibus y minutos después, cuando se había generado un caos, uno de los móviles lo reconoció cuando se dirigía a bordo de un colectivo 7 C en la avenida Bicentenario de la Batalla de Salta.

Los efectivos hicieron frenar el vehículo de pasajeros y se subieron al mismo por lo que el fugado intentó ocultar las esposas que llevaba en sus muñecas, pero fue detenido y trasladado nuevamente hacia el coche de traslados desde donde había llegado.

El particular hecho se registró después de las 19 del jueves pasado, a pocos metros de la Guardia del hospital, y si bien finalizó a las pocas cuadras, generó murmullos entre los presentes.

¿Negligencia?

Se supo que el Juzgado Federal 2 quedó a cargo de la investigación del caso.

Fuentes extraoficiales le comentaron a este matutino que el magistrado de turno intentará establecer si hubo complicidad de los custodios o simplemente el hecho ocurrió por negligencia de los mismos.

De todas maneras, personas allegadas al hospital San Bernardo dijeron que es común ver a los presos prácticamente solos por los pasillos del nosocomio, ya que por lo general sus custodios los esperan afuera de la guardia.

Por su parte, el apresado, de quien no se supo su identidad, deberá declarar en las próximas horas por lo sucedido y se le realizará un informe por haberse fugado y luego recapturado.

 

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