“Mucho ruido y pocas nueces”, fue la frase que eligió una vecina para graficar la protesta que llevaron adelante un centenar de personas que se congregaron frente a la sede de la escuela de suboficiales José A. Saravia, ubicada en el predio de Caballería, para protestar frente a las autoridades de la misma por la presencia de los cuatro imputados por el crimen de Gabriel Mura Ortiz, abatido supuestamente por una perdigonada de una escopeta policial.
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“Mucho ruido y pocas nueces”, fue la frase que eligió una vecina para graficar la protesta que llevaron adelante un centenar de personas que se congregaron frente a la sede de la escuela de suboficiales José A. Saravia, ubicada en el predio de Caballería, para protestar frente a las autoridades de la misma por la presencia de los cuatro imputados por el crimen de Gabriel Mura Ortiz, abatido supuestamente por una perdigonada de una escopeta policial.
La manifestación estaba compuesta de unas cien personas, la mayoría de ellas mujeres. Había por consiguiente muchos niños y un nutrido grupo de percusionistas, de aquellos que van a alentar el fútbol en las canchas.
Las mujeres portando fotografías del trabajador asesinado y pancartas solicitando justicia y cárcel común para los imputados interrumpieron el principal ingreso al predio de la escuela de policías e impidieron el ingreso o egreso de vehículos.
El vecindario siguió paso a paso lo acontecido por la manifestación de protesta, en tanto un cordón policial integrado en su mayoría por cadetes de la citada escuela, se apostó detrás de las rejas del ingreso.
No hubo violencia ni contacto físico de ninguna naturaleza, pero sí excesos verbales que llegaron al insulto en contra de la fuerza pública y de sus principales jefes, a quienes señalaron los manifestantes como los responsables de que los cuatro imputados gocen de privilegios durante su cautiverio.
Una alta fuente policial consultada ayer sobre el tema dijo que hay razones de seguridad en la decisión de alojar en esas instalaciones a los imputados.
En tanto, los manifestantes dijeron que en la Alcaidía judicial hay un pabellón exclusivo para los policías que delinquen, que señalaron como el pabellón 3.
“Aquí gozan de computadoras, internet, buena comida, régimen especial de visitas y la camaradería de los propios pares, es decir están como en la casa o mejor”, dijeron los familiares del malogrado Mura Ortiz, quienes aseguraron que hoy van a manifestarse en la Ciudad Judicial por el mismo motivo, o sea el privilegio del lugar de detención de los cuatro acusados de un supuesto homicidio policial.