Las relaciones entre el campo y el Gobierno se tensan cada vez más y parece que la molestia del sector se acrecienta con las últimas acciones que llevó adelante el cristinismo en los últimos días. En este marco es que el presidente de la Sociedad Rural, Luis Miguel Etchevehere, señaló ayer que a mediados de abril los productores agropecuarios podrían decidir dejar de vender soja “por tiempo indeterminado” en caso de no lograr avances con el Gobierno ante los reclamos del sector.
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Las relaciones entre el campo y el Gobierno se tensan cada vez más y parece que la molestia del sector se acrecienta con las últimas acciones que llevó adelante el cristinismo en los últimos días. En este marco es que el presidente de la Sociedad Rural, Luis Miguel Etchevehere, señaló ayer que a mediados de abril los productores agropecuarios podrían decidir dejar de vender soja “por tiempo indeterminado” en caso de no lograr avances con el Gobierno ante los reclamos del sector.
Etchevehere afirmó que durante una asamblea de productores que integran la Mesa de Enlace agropecuaria, realizada el viernes en la ciudad bonaerense de Pehuajó, se decidió que “pasemos directamente de la postura de pedir diálogo a la protesta”.
“La de Pehuajó fue la primera asamblea de una serie en otros lugares del país y vamos a ver si los productores están en esta línea”, señaló el dirigente entrerriano.
El dirigente señaló que la principal propuesta del sector fue realizar un cese de comercialización o “paro por tiempo indeterminado o por el plazo que después se decida”.
El recuerdo de la efervescencia del reclamo de 2008 fue protagonista durante la asamblea. Tanto los dirigentes como los productores (unos 2.000 según contabilizaron desde las entidades agropecuarias) dieron muestras de querer participar activamente como ocurrió aquel año.
Etchevehere recordó: “Dimos probadas fuerzas de nuestra organización en 2008”.
Y advirtió que los productores agropecuarios tienen límites “para soportar el ataque que está llevando adelante el Gobierno”.
Lo que viene
En ese marco, ante una consulta de radio El Mundo, precisó que pensaban terminar la ronda “a comienzos de abril o a mediados” por lo que la protesta, que puede incluir el cese de comercialización de granos, se establecería “a partir de esa época, cuando salga la cosecha nueva”.
Afirmó que la medida surgió “después de 13 meses de la primera y última reunión con el ministro de Agricultura (Norberto Yauhar), en enero de 2012, con quien nunca pudimos ver ni hablar de políticas agropecuarias, ni de pedir diálogo y sufrir la confiscación del Rentare y el intento de confiscación del predio de Palermo”.
Sobre la advertencia de la AFIP contra productores que retienen granos, Etchevehere dijo que “lo tomamos como un ataque, un intento de amedrentar de la AFIP porque ella tiene perfectamente todos los detalles de las existencias en su poder”. Describió que una producción anual de 40 millones de granos, “solo quedan 1,6 o 1,7 millones en posesión de productores o acopiadores, o sea prácticamente nada”. El dirigente precisó que los productores en asamblea reclamaron que “devuelvan la competitividad” y expresó que "estamos comprando insumos a 7.70 pesos y estamos cobrando la soja a un dólar de 3.20”.
Aseguró que “la diferencia entre el dólar blue y el dólar agropecuario” hace que muchas regiones del país estén comprometida por una situación de quebranto.
Sobre el control de precios
Etchevehere rechazó el control de precios y dijo que “todas las veces que se intentó poner precios máximos, vedas y restricciones a la exportaciones y a las importaciones fracasaron rotundamente”.
Sostuvo que en el caso del azúcar “al productor le pagan 65 centavos el kilo, pero en la góndola la están racionando a 6 o 7 pesos” y agregó que los intermediarios expresan que “en el día 61 este producto va a valer más”.