El presidente de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, advirtió hoy que el tribunal "no debe gobernar", recalcó que su función es alertar sobre "lo que es contrario a la Constitución Nacional", aseguró que es "transparente" e "independiente de los intereses económicos" y reconoció que "debe cambiar" en "beneficio del pueblo".
Lorenzetti pronunció un discursó en el acto para celebrar los 150 años del máximo tribunal, en el que no asistieron los funcionarios del gobierno nacional que habían sido invitados.
Sin el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Julio Alak, ni la Procuradora General, Alejandra Gils Carbó, el juez Ricardo Lorenzetti agradeció la presencia de "todos" los que se habían acercado este mediodía hasta Salón de Audiencias del Palacio de Tribunales para escuchar su discurso, frente a los anuncios oficiales sobre la "democratización" de la Justicia.
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El presidente de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, advirtió hoy que el tribunal "no debe gobernar", recalcó que su función es alertar sobre "lo que es contrario a la Constitución Nacional", aseguró que es "transparente" e "independiente de los intereses económicos" y reconoció que "debe cambiar" en "beneficio del pueblo".
Lorenzetti pronunció un discursó en el acto para celebrar los 150 años del máximo tribunal, en el que no asistieron los funcionarios del gobierno nacional que habían sido invitados.
Sin el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Julio Alak, ni la Procuradora General, Alejandra Gils Carbó, el juez Ricardo Lorenzetti agradeció la presencia de "todos" los que se habían acercado este mediodía hasta Salón de Audiencias del Palacio de Tribunales para escuchar su discurso, frente a los anuncios oficiales sobre la "democratización" de la Justicia.
"Nunca hemos dicho al poder político lo que tiene que hacer, sino que hemos dicho lo que es contrario a la Constitución, o hemos afirmado lo que la Constitución quiere que se haga -sostuvo-. Lo que la Constitución quiere que hagamos es que defendamos un país con libertades personales, con igualdad, sin exclusión social, con sustentabilidad ambiental, sobre la base de una serie de principios que todos compartimos, sin perjuicio de nuestras diferencias". En un clara alusión a los integrantes del Poder Judicial, Lorenzetti sostuvo que "no es buen juez quien quiere imponer sus propias convicciones o las de un sector a todos los demás, porque esa decisión no dura en el tiempo".
Las palabras de Lorenzetti abrieron así el acto de apertura de un año judicial en donde la Corte deberá resolver la constitucionalidad de algunos artículos de la Ley de Medios, y a horas de la convocatoria de funcionarios y magistrados afines al kirchnerismo -encabezados por la procuradora Gils Carbó- que se reunirán en la Biblioteca Nacional para trabajar sobre lo que se dio en llamar "Justicia legítima".
El acto comenzó con la exhibición de un video en donde cada uno de los integrantes de la Corte Suprema -salvo Lorenzetti- hablaban de cuál debe ser el papel del máximo tribunal a 150 años de su creación.
Enrique Petracci, Raúl Zaffaroni, Juan Carlos Maqueda, Carlos Faty, Elena Highton de Nolasco y Carmen Argibay resaltaron el trabajo del tribunal para defender "la Constitución Nacional".
Luego, Lorenzetti tomó la palabra durante unos 30 minutos para advertir que la Corte "debe defender el Estado de Derecho" y "garantizar los derechos y la libertad de los argentinos, con independencia de todo otro poder jurídico o fáctico".
Lorenzetti hizo así un repaso de la defensa desde la Corte de "la libertad de expresión" y "la propiedad en sentido amplio", desde su creación, y aclaró que en los últimos años se amplió también "el derecho a la alimentación de los sectores más postergados" y "el derecho a la vivienda digna cuando se presentan situaciones de extrema urgencia y vulnerabilidad".
"Durante muchos años la Corte fue un lugar para pocos, cuando debió ser para todos, cuando debió ser la casa de todos los argentinos", remarcó el juez.
En una parte de su discurso, el juez resaltó que "es esencial que seamos trasparente en nuestra conducta" y "mostrar una clara independencia de los intereses económicos", uno de los puntos que había sido cuestionado por la procuradora Gils Carbó en las ultimas horas al sostener que "la justicia actual es ilegítima, corporativa, oscurantista y de lobbies aceitados".
Lorenzetti también advirtió que no hay que "temer al conflicto" porque "ya no hay pensamiento único", como había en otros tiempos, y remarcó: "hay conflictos y consensos básicos o mínimos. El conflicto debe existir, es el motor de la vida social; no hay que tener miedo a los debates fuertes, a la colisión de intereses, porque es lo que permite la transformación de las sociedades".
Fue en el marco de esas diferencias que Lorenzetti disparó: "a algunos les llama la atención nuestra posición de equilibrio" y "les parece ambigua", pero "esta Corte no es ambigua con los principios que son claros y coherentes; (los principios) de la Constitución, los del contrato social de los argentinos".
En ese sentido, Lorenzetti advirtió que la Corte "no debe gobernar" sino "ser consistente con las decisiones de la mayoría del pueblo", aunque esas premisas pueden "ser declaradas inválidas por los jueces cuando son contrarias a la Constitución".
Dejó ver que así que en los años 30 "la Corte convalidó la legislación de facto y hubo periodos de dictadura durante los cuales la posición de los jueces no fue lo suficientemente firme", pero aclaró que la Corte ahora ha cambiado "esa posición", reconociendo "la categoría de los delitos de lesa humanidad" y abriendo los juicios para investigar esos crímenes.
A la luz de ese ejemplo, el juez sostuvo: "nosotros pensamos que el Poder Judicial también debe cambiar, y que esos cambios deben ser en beneficio del pueblo", con el fin de mejorar "el acceso a justicia y la demora en la resolución de los pleitos" porque, admitió, "la justicia lenta no conforma".
"Es necesario que todos actuemos conjuntamente: que se legisle para hacer procedimientos más sencillos, que se nombren más jueces y que los jueces, empleados y funcionarios hagan un esfuerzo para que los que padecen injusticias no sufran demoras injustificadas", se añadió.