De acuerdo a lo publicado por el matutino ABC, uno de los medios que informó con mayor precisión acerca de los pormenores de la enfermedad de Hugo Chávez, Presidente de Venezuela, desde que éste anunciara su cáncer a mediados del 2011, la Presidente Cristina Kirchner no solo viajó a Caracas para despedir al difunto caudillo, sino que también habría llevado una suerte de testamento político con el objetivo de desactivar las internas dentro del chavismo por la sucesión.
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De acuerdo a lo publicado por el matutino ABC, uno de los medios que informó con mayor precisión acerca de los pormenores de la enfermedad de Hugo Chávez, Presidente de Venezuela, desde que éste anunciara su cáncer a mediados del 2011, la Presidente Cristina Kirchner no solo viajó a Caracas para despedir al difunto caudillo, sino que también habría llevado una suerte de testamento político con el objetivo de desactivar las internas dentro del chavismo por la sucesión.
Según el diario español, la mandataria argentina llevó a Caracas dos cartas redactadas por el propio Hugo Chávez antes de su última operación realizada en La Habana el pasado diciembre, en las que el bolivariano dejaba asentado su deseo de que fuese el entonces vicepresidente Nicolás Maduro -y no Diosdado Cabello, presidente de la Asamblea General, a quien constitucionalmente le correspondía el cargo- su sucesor para ocupar la jefatura de Estado de Venezuela.
“Aunque Chávez había hecho esa designación también de palabra y públicamente el 8 de diciembre antes de marchar a Cuba para su operación, el carácter testamentario del documento acabó por derrotar las aspiraciones de Cabello”, asegura la nota, que afirma que la llegada de Kirchner con sendas cartas “acabó por desactivar cualquier oposición” a la designación del ahora “presidente encargado” Maduro, quien se enfrentará al líder opositor Henrique Capriles en los comicios del próximo 14 de abril.
En la versión publicada por el diario ABC, la muerte del caudillo venezolano se habría producido sobre las 7 de la mañana del martes, y no a las 16:25 como dijo Maduro al anunciar su muerte en su segunda conferencia de prensa de ese día, y Cabello habría sido informado del deceso recién cuando la noticia comenzó a ser trasladada a un círculo más amplio de dirigentes chavistas.
“La coincidencia de la muerte y sepelio de la madre de Cabello acabó por desactivar su capacidad de reacción”, indica el artículo, que sostiene que la preferencia de los hermanos Raúl y Fidel Castro por ex canciller fue clave en inclinar la balanza a favor de Nicolás Maduro.
En ese sentido, según el diario español no es fortuito que la llegada del dictador cubano Raúl Castro el jueves por la tarde coincidiera con la aprobación por parte del Tribunal Supremo de Justicia de la constitucionalidad de la designación de Maduro y el anuncio de que la Asamblea Nacional le tomaría juramento el viernes. Para el ABC, “pocos dudan que Cuba ha llevado la batuta, acaparando el control sobre el moribundo Chávez”.