Quebrar “barreras culturales” parece haberse convertido en el principal desafío que afrontan las compañías de tarjetas de crédito en el país, en su intento por sumar clientes en nuevos segmentos, como el sector pyme.
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Quebrar “barreras culturales” parece haberse convertido en el principal desafío que afrontan las compañías de tarjetas de crédito en el país, en su intento por sumar clientes en nuevos segmentos, como el sector pyme.
El ámbito de las pequeñas y medianas empresas es visto por las firmas de plásticos como un territorio aún fértil para el negocio, habida cuenta de que el 100 por ciento de los dueños de pymes en la Argentina poseen una cuenta bancaria personal, el 87% la utiliza para sus negocios, pero el 53% de ellos aún prefiere manejarse en efectivo.
De todos modos, el 56% de las pymes tiene, además, una cuenta corporativa y más de la mitad posee una tarjeta de crédito empresarial, una característica que se acentuó en los últimos meses y que es vista por las compañías de plásticos como un síntoma del potencial de crecimiento que ofrece el sector.
La cuarta edición del estudio “Perspectivas de las MiPyMEs en Argentina y América Latina 2012”, elaborado por Visa Internacional y la consultora América Economía, reveló una alta penetración de tarjetas empresariales en las micro, pequeñas y medianas compañías del país, con una expansión de más del 150% con respecto a 2010.
Así, en momentos en los que el mercado de tarjetas personales parece estar llegando a su punto de saturación, las empresas del sector buscan expandirse en nuevos nichos y apuntan de lleno en un segmento atrayente, pero que aún muestra “barreras culturales” que superar, como el predominio del uso del dinero en efectivo. En estos términos se expresaron el jefe de negocios corporativos de Visa Argentina, Sebastián Martínez, y el director regional del segmento MiPyMEs de Visa Internacional, Carlos Corominas, durante la presentación del estudio, realizado en la ciudad de Buenos Aires entre 150 empresas de los sectores comerciales, de servicios y manufactura con una facturación anual de hasta 5 millones de dólares.