Para Newell's era determinante, decisivo, ganar este partido para sus aspiraciones de pasar a la siguiente fase y cumplir con los objetivos trazados. Lo consiguió sin problemas y ahora quedó a un paso de la clasificación a octavos de final. Además, Gerardo Martino había adelantado en la semana que el equipo todavía no alcanzó su mejor versión. Ayer le bastó con la jerarquía de Scocco y con su volumen de juego habitual para despachar sin problemas a un limitado Deportivo Lara.
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Para Newell's era determinante, decisivo, ganar este partido para sus aspiraciones de pasar a la siguiente fase y cumplir con los objetivos trazados. Lo consiguió sin problemas y ahora quedó a un paso de la clasificación a octavos de final. Además, Gerardo Martino había adelantado en la semana que el equipo todavía no alcanzó su mejor versión. Ayer le bastó con la jerarquía de Scocco y con su volumen de juego habitual para despachar sin problemas a un limitado Deportivo Lara.
Lo más difícil en este tipo de partidos es marcar el primer gol. Lo encontró en el arranque: Maxi Rodríguez cambió de frente para Scocco, el goleador envió un centro a área que conectó Pablo Pérez y con una definición poco ortodoxa, rematando contra el piso, marcó el primer tanto. A partir de allí, Newell's tuvo todo para liquidar el partido. Pero jugó de ratos, ante un rival que dio muchas ventajas de mitad de cancha hacia atrás. Dio la sensación que si el equipo de Martino apretaba el acelerador la primera etapa terminaba con cuatro o cinco goles a favor. Aunque también tuvo algo de impericia e imprecisión en el área rival.
Eso sí, antes de antes del golazo de Scocco cuando se terminaba el primer tiempo, con esa exquisita definición tras el gran pase de Figueroa, Newell's tuvo al menos tres situaciones claras de gol. Pero también dejó el partido abierto y le permitió a Lara, que llegó con un esquema opaco, estar a tiro del empate, con esa guapeada de Ocanto, que dejó en el camino a Casco y a Víctor López, y el remate final fue bien tapado por Guzmán.
En la segunda etapa, más que regular, Newell's se relajó. Tuvo chances para aumentar pero no resolvió con el ímpetu que se necesitaba. Se expuso al empate nnecesariamente. Porque Lara encontró un gol casi sin buscarlo (fue parecido al de Pablo Pérez pero la definición de Pérez Greco fue mejor). Y hasta exigió a Guzmán en los minutos finales.
Pero Newell's tiene a San Scocco, que demostró una vez que es uno de los mejores jugadores que tiene el fútbol argentino. El goleador encaró desde la mitad de cancha, enganchó dos veces y selló el triunfo para la tranquilidad de todos los locales.