No conoce la derrota en las finales y ayer lo ratificó. El Atlético de Madrid, de la mano de Diego Simeone, se coronó campeón de la Copa del Rey, luego de vencer por 2 a 1 al Real Madrid. Ahora definirá la Supercopa de España ante Barcelona.
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No conoce la derrota en las finales y ayer lo ratificó. El Atlético de Madrid, de la mano de Diego Simeone, se coronó campeón de la Copa del Rey, luego de vencer por 2 a 1 al Real Madrid. Ahora definirá la Supercopa de España ante Barcelona.
El Cholo, además, logró romper malas rachas del Atlético y se consolida como uno de los mejores técnicos en el Viejo Continente.
Los goles de la final disputada en el estadio Santiago Bernabéu fueron convertidos por Diego Costa (PT 35') y Joao Miranda (ST 52'), para el Atlético; mientras que Cristiano Ronaldo (14' PT), que se fue expulsado en el final del encuentro, había abierto el marcador para el Real Madrid.
Con esta victoria, los colchoneros cortaron su peor racha de 14 años sin alegrías ante su poderoso vecino, al cual no vencía desde el 30 de octubre de 1999 y, desde entonces, habían disputado 25 derbis sin triunfos del Atlético.
Además, frenaron la maldición de 17 años sin ganar la Copa, la décima de su historia, ya que la última fue en 1996, con Simeone como mediocampista, cuando venció a Barcelona por 1 a 0 en la final.
De esta manera, Simeone se convirtió en especialista en partidos definitorios, con tres jugadas y dos ganadas durante 2012, y la de ayer donde nunca partió como favorito. Antes había vencido a Athletic de Bilbao, dirigido por Marcelo Bielsa, por 3-0 en la Liga de Europa y al Chelsea inglés en la Supercopa continental, por 4-1.
Otros argentinos que participaron en esta final fueron Angel Di María y Gonzalo Higuaín, quienes ingresaron sobre el final del encuentro en el equipo merengue; mientras que Daniel Díaz estuvo en el banco de suplentes del Atlético.
Por otro lado, luego del fracaso en la Liga de Campeones y de ceder en la lucha por la liga española que quedó en manos del Barcelona, el técnico José Mourinho consumó una temporada para el olvido. Hoy su futuro parece lejos del Real, pese a que le quedan 2 años de contrato.