Josep Guardiola, varias veces destacado como el mejor entrenador de fútbol del mundo, deslizó que no volverá a dirigir al Barcelona al considerar que es una etapa cerrada, y se abstuvo de hablar del Bayern Munich, su futuro equipo. “Es una etapa cerrada. Uno se hace adulto, fue una fantástica etapa en mi vida pero se acabó”, dijo Guardiola cuando uno entre tantos niños de escuelas primarias porteñas le preguntó si volvería a dirigir al Barca.
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Josep Guardiola, varias veces destacado como el mejor entrenador de fútbol del mundo, deslizó que no volverá a dirigir al Barcelona al considerar que es una etapa cerrada, y se abstuvo de hablar del Bayern Munich, su futuro equipo. “Es una etapa cerrada. Uno se hace adulto, fue una fantástica etapa en mi vida pero se acabó”, dijo Guardiola cuando uno entre tantos niños de escuelas primarias porteñas le preguntó si volvería a dirigir al Barca.
Guardiola dio una charla ante esos chicos en un encuentro organizado por el gobierno porteño en La Usina del Arte en La Boca. Hasta el jefe de gobierno, Mauricio Macri, preguntó sobre los postulantes de Guardiola a ganar el Mundial de Brasil 2014: “España máxima candidata...y los de siempre, Argentina, Brasil, Alemania, estos cuatro, déjame la propina”, le respondió Pep.
Las preguntas que muchos chicos hicieron derivó en las respuestas que los grandes requieren de Guardiola.
“Es un orgullo muy grande haber formado parte del Barcelona, pero la vida sigue y hay que buscar otros retos”, sostuvo, insistiendo en que será difícil que vuelva a dirigir al conjunto catalán.
A modo de lección a los niños, les aseguro que “no se pueden conseguir grandes cosas si sos mala gente” y confió que al dejar el Barcelona sintió “una gran tranquilidad”.
El DT, con cuidado de no herir a un sensible auditorio, se abstuvo de hablar del Bayern Munich, holgado vencedor del Barcelona en las semifinales de la Champions League. “Sería incorrecto hablar de lo que puedo hacer en el Bayern, que está en plena competición. Cuando llegue, podemos empezar a hablar”, dijo.
Fue esta la primera actividad en el país de Guardiola, quien llegó de la mano del Grupo Rhuo para dar una charla sobre manejo de grupos y liderazgo en el teatro Gran Rex, con un auditorio de 3.500 personas que agotaron las entradas con valores de entre 250 y 1.200 pesos.