Mientras ayer comenzaron las indagatorias a los seis gendarmes imputados por el homicidio del bagayero Gerardo Gabriel Tercero, la Policía de la Provincia trata de localizar a un testigo clave de los graves sucesos del sábado pasado en el Puesto 28. En medio del clima de tensión que se vive en la frontera norte, los pasadores de mercadería denunciaron que continúan los atropellos por parte de la Gendarmería en el estratégico puesto de control que la fuerza tiene sobre la ruta nacional 50 y por ese motivo anoche realizaron una manifestación en Orán. A última hora trascendió que una integrante del cuerpo femenino de Gendarmería habría sido agredida por tres bagayeras en la terminal de ómnibus.
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Mientras ayer comenzaron las indagatorias a los seis gendarmes imputados por el homicidio del bagayero Gerardo Gabriel Tercero, la Policía de la Provincia trata de localizar a un testigo clave de los graves sucesos del sábado pasado en el Puesto 28. En medio del clima de tensión que se vive en la frontera norte, los pasadores de mercadería denunciaron que continúan los atropellos por parte de la Gendarmería en el estratégico puesto de control que la fuerza tiene sobre la ruta nacional 50 y por ese motivo anoche realizaron una manifestación en Orán. A última hora trascendió que una integrante del cuerpo femenino de Gendarmería habría sido agredida por tres bagayeras en la terminal de ómnibus.
En horas de la mañana, los seis efectivos acusados por el crimen del joven Tercero fueron trasladados al despacho del juez Raúl Reynoso para ser indagados, sin que hayan trascendido detalles de esa diligencia debido al secreto del sumario. Se confirmó que todos están imputados de homicidio calificado, sin que se haya podido establecer quién fue el que efectuó el disparo que causó la muerte del bagayero durante el violento enfrentamiento del sábado a la tarde. Los acusados fueron identificados como Raúl Soto, César Alberto Schweikofsky, Santiago Pereyra, Nélida Beatriz Jara, Emmanuel Esteban Morales y Raúl Osvaldo Maciel.
Ante una consulta de El Tibuno, Reynoso informó que a partir de una denuncia realizada por los involucrados se abrió una causa por los delitos de lesiones calificadas, daño calificado, robo, intimidación pública, atentado y resistencia a la autoridad, entorpecimiento de los deberes de funcionario público y contrabando de importación. “No tenemos detenidos por esta última causa y se están realizando todas las diligencias para determinar a los autores”, expresó el juez.
Según Reynoso, la policía está tras los pasos de una persona que observó todo lo sucedido el sábado cuando una patrulla de ocho gendarmes interceptó a una columna de bagayeros que transportaban mercadería de contrabando por un desvío del Puesto 28. “El testimonio de esta persona va a ser importante, ya que se trata de alguien que no tiene nada que ver con la Gendarmería ni con los bagayeros”, señaló el magistrado. Fuentes vinculadas con la investigación revelaron que el testigo de marras ya estaría identificado y esperan que de un momento a otro pueda ser localizado.
En el marco de las diligencias que realiza el juez de la causa, se dispuso la pericia de las armas secuestradas a los gendarmes implicados para cotejarlas con el plomo extraído del cuerpo de Tercero. Esto permitirá conocer quién fue el autor del mortal disparo.
Al cierre de esta edición los bagayeros cortaban la calle donde está la unidad regional de Orán. Allí se encuentran detenidos los seis gendarmes.
Mañana llega el gabinete provincial
Ante el clima de tensión que se generó con la muerte del bagayero, el gabinete provincial se reunirá mañana en Orán para analizar las medidas a adoptar frente al conflicto que se está viviendo en la zona. “La única alternativa de trabajo que hay en la zona es el bagayeo; ahora somos tres mil y dentro de poco vamos a ser diez mil, veinte mil”, sentenció una mujer durante la asamblea realizada ayer a la tarde por los bagayero reunidos en la playa de camiones ubicada en la zona de la terminal. Los pasadores se concentraron a partir de las 17 en ese espacio donde realizan la transacción de la mercadería que traen de la feria de Bermejo, Bolivia. En un momento se observaron corridas y salidas apresuradas de vehículos cargados con ropa luego de que alguien alertara de que la Gendarmería se aprestaba a invadir el lugar, tal como ocurrió el 7 del corriente cuando se produjo el primer enfrentamiento con la fuerza. Tras confirmar que se trató de una falsa alarma, comenzó la asamblea prevista para determinar los pasos a seguir. A su término unos 20 bagayeros se concentraron en la esquina de la feria ubicada frente a la terminal de ómnibus donde quemaron cubiertas y cortaron el tránsito.