El nuevo arzobispo porteño, Mario Poli, encabezó por primera vez el tedeum en la Catedral Metropolitana y declaró en su discurso que no hay que “tenerle miedo a la variedad de ideas”.
“Debemos apostar por una comunidad que no le tenga miedo a la variedad de ideas”, dijo el arzobispo, y agregó: “lejos de confundir a una sociedad, la variedad más bien la manifiesta”. Poli se refirió a la Revolución de Mayo y la tomó como ejemplo para asegurar que “no faltaron momentos en la argentina en que hubo acuerdos fundamentales”, y luego añadió: “no hay que perder la esperanza de hacer juntos el camino, en nuestra historia hay ejemplos de diálogo fecundo. Si queremos, sabemos cómo encontrarnos”.
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El nuevo arzobispo porteño, Mario Poli, encabezó por primera vez el tedeum en la Catedral Metropolitana y declaró en su discurso que no hay que “tenerle miedo a la variedad de ideas”.
“Debemos apostar por una comunidad que no le tenga miedo a la variedad de ideas”, dijo el arzobispo, y agregó: “lejos de confundir a una sociedad, la variedad más bien la manifiesta”. Poli se refirió a la Revolución de Mayo y la tomó como ejemplo para asegurar que “no faltaron momentos en la argentina en que hubo acuerdos fundamentales”, y luego añadió: “no hay que perder la esperanza de hacer juntos el camino, en nuestra historia hay ejemplos de diálogo fecundo. Si queremos, sabemos cómo encontrarnos”.
El Arzobispo también llamó a recordar la labor del excardenal Jorge Bergoglio, ahora Papa Francisco: “nuestro hermano, que ahora ya no es más nuestro, sino de todos”. Pidió luego que seamos guardianes del medio ambiente y no dejemos que los signos de destrucción nos invadan: “el odio, la envidia, no deben invadirnos”.