El mercado de pases del torneo Argentino A que arrancará el próximo 18 de agosto entregó otra edición del "culebrón de la tarde". El mismo que hace algunas semanas tuvo como protagonista a Matías Ceballos y a Leandro Zárate y que ayer ofreció la novela de Osvaldo Young -nuevo jugador de Guaraní- hoy pone en el centro de la escena a Matías Guerra.
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El mercado de pases del torneo Argentino A que arrancará el próximo 18 de agosto entregó otra edición del "culebrón de la tarde". El mismo que hace algunas semanas tuvo como protagonista a Matías Ceballos y a Leandro Zárate y que ayer ofreció la novela de Osvaldo Young -nuevo jugador de Guaraní- hoy pone en el centro de la escena a Matías Guerra.
El volante mendocino fue anunciado con bombos y platillos como nuevo refuerzo de Gimnasia la semana pasada, sin embargo, cuando todo hacía presagiar que el jugador vendría a Salta a estampar su rúbrica, desde Deportivo Maipú, club con el cual el mediocampista tiene aún un contrato por un año más, frenó su pase al albo.
Los incidentes del encuentro de cuartos de final entre el equipo del Tano Riggio y el botellero mendocino, y la posterior denuncia a través del Inadi por los dichos xenófobos de los hermanos Sperdutti, jugaron un papel preponderante en la ruptura de la negociación. Por otra parte, el hecho de que los dirigentes de Gimnasia iognoraran días atrás que Guerra tenía aún vínculo contractual con el cruzado le agrega un matiz de mayor desprolijidad a la situación. Lo cierto es que desde el club albo hoy afirman que no quieren contratar al jugador por cuestiones poco claras, mientras que el futbolista asegura que el pase no se hizo por "diferencias económicas".
Por otra parte, otra negociación frustrada en el albo involucraría a Diego Ianiero, quien pese a tener acuerdo de palabra para continuar, estaría a un paso de aceptar una propuesta económica del club Almagro, de la Primera B Metropolitana.