Lejos del congelamiento oficial, la designación del nuevo jefe del Ejército sigue en ebullición política. Solo dos días después de que la presidenta Cristina de Kirchner decidiera suspender hasta fin de año el tratamiento en el Senado de los pliegos de los nuevos jefes de las Fuerza Armadas, el radicalismo denunció ayer al secretario de Derechos Humanos, Juan Martín Fresneda, por ocultar información sobre el general César Milani. Según la demanda presentada en los tribunales de Comodoro Py, Fresneda no entregó la información sobre causas por violaciones a los derechos humanos en el pliego que asciende Milani al máximo cargo en el Ejército.
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Lejos del congelamiento oficial, la designación del nuevo jefe del Ejército sigue en ebullición política. Solo dos días después de que la presidenta Cristina de Kirchner decidiera suspender hasta fin de año el tratamiento en el Senado de los pliegos de los nuevos jefes de las Fuerza Armadas, el radicalismo denunció ayer al secretario de Derechos Humanos, Juan Martín Fresneda, por ocultar información sobre el general César Milani. Según la demanda presentada en los tribunales de Comodoro Py, Fresneda no entregó la información sobre causas por violaciones a los derechos humanos en el pliego que asciende Milani al máximo cargo en el Ejército.
De esta manera y según el comunicado emitido por la UCR, “Fresneda debió haber informado al Ministerio de Defensa sobre las causas por violaciones a los derechos humanos y acciones inconstitucionales que figuraban en expedientes judiciales y actuaciones administrativas, según se dio a conocer el 22 de agosto a través del CELS”. Así, el funcionario camporista ocultó esta información en un claro incumplimiento a sus deberes legales como funcionario público. Y quien se sumó a la denuncia fue el candidato a diputado nacional por el Frente Progresista bonaerense Ricardo Alfonsín, quien denunció que el kirchnerismo quiere poner a las Fuerzas Armadas al servicio del partido de gobierno.
“El Ejército no debe servir a un partido o a una persona, sino al sistema democrático. Sólo a un gobernante sin convicciones democráticas se le puede ocurrir ponerlas al servicio de un partido”, sentenció.
Pero la otra campana también se hizo sentir, luego de que el ministro de Defensa, Agustín Rossi, asegurara ayer que “el Gobierno actuó en función de las informaciones oficiales” existentes al momento de enviar al Congreso el pliego de ascenso del general César Milani y destacó que en ese momento no había ninguna presentación en el juzgado Federal de La Rioja ni en el de Tucumán.
Durante una recorrida junto a Milani por la VI Brigada Aérea y la Brigada Blindada I, en Tandil, Rossi afirmó que el jefe del Ejército “nunca presentó la renuncia” a su cargo.
Desde radio Madres, el ministro señaló que se hicieron las consultas habituales con cada uno de los ascensos de los jefes de la fuerza.
Cabe destacar que el martes Cristina Fernández defendió la decisión de posponer el tratamiento del pliego de Milani en el Senado y apuntó contra los dirigentes que votaron en su momento las leyes de obediencia debida y punto final.
Otra vez, la respuesta no se hizo esperar. “La Presidenta se olvidó nada más ni nada menos, de que ella apoyó la ley de impunidad más gravosa para los derechos humanos: la de autoamnistía sancionada por los militares antes de la llegada de la democracia”, recordó.